Los paparazzi cazan a Paloma Rocasolano y a su novio Marcus, uno más en la familia

Fue tan solo hace unas semanas cuando saltaba la noticia de que la suegra del Rey tenía una nueva ilusión, gracias a unas fotos de ambos paseando juntos. Ahora Paloma Rocasolano y Marcus Tokuaboh Brandler continúan paso a paso afianzando su amor, como demuestra su última cita que terminó siendo captada por los objetivos de los fotógrafos.

Con actitud cómplice y entre risas, la madre de la reina Letizia y su pareja, que ya está integrado perfectamente en la familia, compartieron una cerveza que acompañaron con una ración de patatas bravas. Su cita tuvo lugar además en una terraza cercana al domicilio de ella, sin miedo a miradas indiscretas.

Acostumbrada a mantenerse en un discreto segundo plano, esta nueva relación ha causado sorpresa, ya que desde que se separara de Jesús Ortiz en 1999 tras 28 años de matrimonio es la primera vez que, a sus 69 años, la vemos abrir su corazón de nuevo, más allá de una relación que mantuvo en 2005 con un arquitecto asturiano que no terminó de llegar a buen puerto.

Pese a que se especuló con que la presentación oficial de este idilio en plena madurez se produjera en la reciente entrega de los Premios Princesa de Asturias, en los que Paloma estuvo presente junto a su familia, finalmente la ansiada foto de ambos juntos no tuvo lugar.

De cómo surgió este romance no se conocen con exactitud los datos de momento, aunque algunos medios apuntan a que pudo hacer de celestina entre ellos Robert Gavin Bonnar, el novio de Telma Ortiz.

El afortunado caballero que ha conquistado a Paloma es un empresario británico, pero nacido en Nigeria, que lleva residiendo en nuestro país cinco años, tras mudarse a Madrid para trabajar como director de la compañía de su familia, que se dedica a la venta al por mayor de té, café, cacao y especias.

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Pero la relación de Marcus con nuestro país se remonta a varios años atrás, ya que ha estado viviendo entre el Reino Unido y España. De hecho, en 1991 se casó con una catalana de Banyoles (Girona) con la que tuvo tres hijos.

Mientras esta historia de amor sigue su curso, con el galán británico perfectamente integrado ya en el círculo íntimo de Paloma Rocasolano, esta no ha dejado de mantener el perfil bajo por el que ha optado desde que se hiciera oficial el compromiso de la periodista Letizia Ortiz con el entonces príncipe Felipe.

Las veces que se ha dejado ver en actos relacionados con la familia paterna de sus nietas, Leonor y Sofía, ha procurado estar en segundo término y, de hecho, nunca ha llegado a posar con la Reina y sus hijas.

Gran apoyo de sus nietas, su relación con ellas es muy directa. Cuando eran pequeñas, y hasta hace poco, se trasladaba al Pabellón del Príncipe (así denominan en Zarzuela a la casa de Felipe VI) cuando los padres tenían viajes oficiales que no fueran en el día. Para Letizia, el que su madre estuviera de supervisora era una garantía.