Kate Middleton deslumbra en Glasgow con un vestido-blazer estilo Letizia

Nada más ver a la duquesa de Cambridge en la recepción de la cumbre del cambio climático que se celebró el día 1 de noviembre por la noche nos viene a la mente una frase: “Este vestido nos suena…”. Sí, Kate Middleton ha deslumbrado en su segunda cita en Glasgow con un vestido-blazer estilo Letizia. En color azul Klein, de largo midi y combinado con unos salones navy de Rupert Sanderson, es muy parecido a uno de los diseños más aplaudidos de la Reina. ¡La mujer de Felipe VI vuelve a ser inspiración para otra royal!

Como todos recordamos, lo estrenó en la Pascua Militar del año 2020 y causó sensación. El pasado mes de enero decidió rescatarlo para la recepción al Cuerpo Diplomático Acreditado en España en el Palacio Real de Madrid, junto a unos stilettos de Nina Ricci. Si los comparamos, vemos que el color es un poco más oscuro que el que lleva Kate, también es algo más largo, y tiene botones joya mientras que los de su ‘gemelo’ son negros y más discretos. Sin embargo, el patrón de ambos es muy similar, de corte sastre y aire sofisticado.

Además de ser uno de los vestidos más aplaudidos de Letizia también es uno de los más misteriosos, pues hasta ahora se desconoce quién lo firma y se piensa que quizá sea obra de la modista de palacio. No así el de Kate Middleton, que ha elegido un diseño de la marca británica Eponine, cuyo precio ronda los 3.000 euros. Otro de los detalles del look que no pasaron inadvertidos fueron sus pendientes, también en azul, de topacio y diamantes, de Kiki McDonough, que ya ha lucido en otras ocasiones. Por cierto, que iba a juego con su marido, que también vestía del mismo color. El pelo recogido en un elegante moño y un discreto clutch para rematar un estilismo de sello Letizia impecable.

Kate volvía a acaparar todos los focos en la recepción del cambio climático en Glasgow, después de su primer acto en el marco de la COP26 celebrado en la mañana del mismo día y en el que conquistó con su naturalidad y simpatía… y con un outfit informal perfecto. Vaqueros, un chaleco acolchado de Ganni, de 400 euros, y botas de montaña de See By Chloè.

Para el acto de la noche, que tuvo lugar en la impresionante destilería Clydeside y al que asistieron los líderes políticos más importantes desde Boris Johnson a Angela Merkle, la duquesa de Cambridge se convirtió de nuevo en protagonista. Y eso que no fueron los únicos Windsor presentes, el príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa, Camilla de Cornualles, también estaban invitados aunque pasaron algo más inadvertidos. El hecho es que Kate destacó no solo por su imagen, también por protagonizar divertidas anécdotas, como cuando le ofreció al príncipe Guillermo una cajita llena de las larvas que se utilizan para alimentar el ganado. La cara de repulsión del duque lo decía todo y las risas de los presentes también… Charló con muchos de los invitados y luego escuchó con atención las palabras de Isabel II, que envió un mensaje grabado ante la imposibilidad de asistir a la cumbre por sus problemas de salud.

La reina, de 95 años, está delicada y los médicos le han impuesto dos semanas de reposo. Aun así ha querido estar presente en un acontecimiento de tanto calado y sus palabras fueron claras y contundentes. "Es necesario reconocer que ha pasado el tiempo de las palabras, es el momento de la acción", comenzó. "Los beneficios de estas acciones no estarán ahí para que los disfrutemos hoy nosotros: ninguno de nosotros vivirá para siempre. Pero hacemos esto no por nosotros, sino por nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos", añadió precisando que los dirigentes políticos tienen la responsabilidad de fijar los objetivos medioambientales de sus países para las próximas décadas pensando en el futuro. "Nadie entre nosotros subestima los retos a los que nos enfrentamos, pero la historia ha demostrado que cuando las naciones se unen en una causa común siempre hay espacio para la esperanza", concluyó.