En un vehículo ecológico y con billete: el viaje de Felipe y Letizia en autobús

La cita de este lunes de los Reyes en Madrid nos ha dejado una imagen nada habitual. Han participado en la conmemoración del 75º aniversario de la Empresa Municipal de Transportes y lo han llevado a cabo de la forma más apropiada: don Felipe y doña Letizia han hecho un viaje en autobús por la capital, en un vehículo ecológico, con su billete en la mano y esperando en la marquesina con el resto de los viajeros hasta que ha llegado el 001, la línea en la que han cubierto el trayecto desde Cibeles hasta el Centro de Operaciones de EMT Madrid en Carabanchel, donde tendría lugar después el acto conmemorativo.

Pasaban unos minutos de las 11:30 de la mañana cuando los reyes Felipe y Letizia llegaban a la calle Alcalá, casi lindando con la plaza de Cibeles, preparados ya para su viaje en autobús. Tras saludar a las autoridades, entre las que estaba el alcalde de Madrid, se dirigían hasta la marquesina para esperar al coche, momento que la Reina ha aprovechado para charlar con otros viajeros que esperaban a utilizar la misma línea que les llevaría a la estación de Atocha. Allí el autobús finalizaba el recorrido para el resto de usuarios pero no para los Reyes, ya que se desviaba de su recorrido habitual y los transportaba hasta la sede de la EMT.

Al subir al vehículo -uno 100% ecológico, de tipo 'cero emisiones'-, los Reyes cogieron su correspondiente billete, previamente expedido por el conductor. Eso sí, ni uno ni otro pagaron el viaje, cortesía de la EMT -aunque tampoco las autoridades que se trasladaron con ellos y que prácticamente llenaban el autobús lo hicieron-. Y si los viajeros que esperaban en la marquesina se sorprendieron al ver a los Reyes llegar a la parada y esperar al autobús junto a ellos, la cara de los que ya estaban montados en el coche de la línea 001 cuando vieron subirse a don Felipe y doña Letizia era aún más expresiva. Acostumbrados a verles en sus vehículos oficiales y con chófer, pocos esperaban tener a unos compañeros de asiento tan ilustres.

Mucha gente que había optado por el transporte público para ir hasta la estación de Atocha esta mañana en Madrid se encontraron con la sorpresa de que estaban compartiendo viaje nada menos que con los Reyes. Y, claro, eso no es algo que uno pueda decir todos los días, así que no dudaron en solicitarles una foto para el recuerdo, un gesto al que ellos agradecieron muy amablemente, conscientes de que ganan muchos puntos cuando acceden a este tipo de peticiones -normales, por otra parte- y muestran su cercanía con la gente.

Los Reyes llegaban al Centro de Operaciones de EMT Madrid, situado en el barrio de Carabanchel, tras media hora de trayecto. Allí recorrían las cocheras, los talleres en los que cada día se pasa revisión y se arreglan las averías de los numerosos vehículos que componen la flota de autobuses urbanos de la capital, además de poder ver por dentro y por fuera cinco vehículos antiguos que han formado parte de los 75 años de historia de la empresa. Y no ha faltado el descubrimiento de una placa conmemorativa para recordar la participación de don Felipe y doña Letizia en este aniversario especial, así como la tradicional foto de familia con todos los trabajadores de la EMT.

No es la primera vez que les vemos utilizar el transporte público para una cita parecida, al menos al rey Felipe, ya que hace tres años participaba en los actos que marcaban el centenario de Metro, haciendo el trayecto entre las estaciones de Sol y Chamartín en el suburbano. Es el mismo camino que recorrió su bisabuelo, Alfonso XIII, cuando se inauguró este medio de transporte en Madrid, que ha cambiado y progresado tanto como lo ha hecho el autobús, tal y como han podido comprobar los Reyes en su visita.

Para esta cita, Letizia ha rescatado un sencillo vestido en color azul, al que le ha dado un toque muy diferente con las botas, negras de caña alta y tacón de aguja, un modelo que le encanta y del que ya tiene varios pares en su zapatero, tanto de Magrit como de Steve Madden. No queremos ver un guiño a sus anfitriones en el color del vestido, ya que el azul es el color de los autobuses de la EMT, pero lo cierto es que si no ha sido intencionado, sí ha sido una curiosa casualidad. El look lo ha completado con un abrigo negro con cinturón que ha llevado abierto. Un outfit discreto y un tanto oscuro para una mañana soleada.

Pero la verdad es que daba igual el look que escogiera la Reina para este lunes, porque ya de por sí ha protagonizado curiosísimas imágenes durante toda la mañana, especialmente por ese viaje en autobús, en el que se ha mezclado con el resto de viajeros y ha probado un medio de transporte nada habitual ni para ella ni para el Rey.