Resolvemos el misterio de los pendientes más enigmáticos de la princesa Leonor

Ya saben que nos encanta saber al detalle de dónde viene cada uno de los elementos que conforman los looks de la reina Letizia y de sus hijas. En ocasiones, hay algunos que no podemos conocer hasta meses o años después, dado que son prendas, complementos o calzados un tanto especiales y que no se pueden encontrar en cualquier tienda. En este caso, vamos a hablar de una pieza que vimos en verano, unos pendientes que lució la princesa Leonor durante su estancia en Mallorca y de los que ahora resolvemos el misterio: su origen es solidario y además muy relacionado con la propia Letizia.

Hablamos de los pendientes que lució en el primer posado familiar en el que participó en la isla, cuando junto a los Reyes y la infanta Sofía visitó el centro de interpretación de la Sierra de Tramuntana y el Santuario de Lluc. Leonor escogió un vestido en azul con microestampado blanco, alpargatas de suela ancha anudadas al tobillo y, la sorpresa, este complemento, en color plata y emulando a una hoja. Era la primera vez que llevaba unos pendientes largos, ya que habitualmente luce diseños mucho más dicretos, pegados al lóbulo o bien los pequeños aros de oro con efecto bambú que comparte con doña Letizia.

Unos días después, quedaba claro que a Leonor le encantaban esos pendientes, puesto que volvían a coronar su look para la última cena en familia de la que disfrutaron en la isla, justo la noche antes de abandonar Mallorca. Una cita para la que la Princesa de Asturias eligió una minifalda de tela vaquera de Mango y una blusa de nido de abeja con escote Bardot troquelado. Y de nuevo los mencionados pendientes, que en ese momento se habían atribuido a la firma Quandari, a la venta en una conocida tienda de Palma.

Pero ahora hemos sabido que su origen es otro, con mucho más significado. Y es cierto que fijándonos en los pendientes de Quandari y en los que llevaba Leonor en estas dos citas, vemos ciertas diferencias, aunque lo cierto es que se pueden confundir en un primer vistazo. Pero los de la Princesa de Asturias presentan los nervios y el borde de las hojas mucho más gruesos, mientras que los que nos han servido de referencia hasta ahora tienen mucho más espacio entre las diferentes partes del 'esqueleto'. Y claro, el motivo es evidente: simplemente, no son los mismos.

Lo curioso es que no se haya sabido su origen hasta ahora, a pesar de que están en manos de la familia real desde el pasado abril. Así lo hemos sabido gracias a las redes sociales de la Asociacion Española de Hiperplasia Suprarrenal Congénita, un nombre tan científico puede no decirles nada. Pero si les explicamos que es una de las denominadas Enfermedades Raras, seguro que ya intuyen de lo que les vamos a hablar y que la propia reina Letizia ha tenido mucho que ver en que su hija mayor tenga estos pendientes.

Hace unas semanas, las redes sociales de la asociación publicaba la historia de estos pendientes. Y, como les decíamos, nos tenemos que remontar hasta el 30 de abril, cuando la Reina viajó hasta Murcia para clausurar el VI Congreso Educativo sobre Enfermedades Raras. En el acto, doña Letizia pudo conocer la Asociación Española HSC a través de su fundadora, Lola Pujante, que además aprovechó para hacerle un regalo en nombre de todos los chicos y chicas que forman parte de la asociación. El regalo eran estos pendientes que, por motivos de protocolo, la Reina no pudo ponerse en el momento ni hacerse una foto con ellos, tal y como explica la publicación.

La sorpresa vino unos meses después cuando, pensando que este regalo se había quedado olvidado en un rincón de Zarzuela, vieron la fotografía de Leonor con los pendientes. Sin duda, un gesto que muestra el apoyo de la familia real a las Enfermedades Raras, una de las grandes causas por las que doña Letizia ha trabajado con más empeño desde su llegada a la Casa Real. Y es un gesto también que deja claro ese camino por el que ha optado la Reina, mostrando su apoyo público a las que son sus grandes preocupaciones.

Ya lo hizo, por ejemplo, también en Mallorca, con los bolsos con estampado de tela de lenguas, que -aunque en su momento generaron polémica por no ser el estampado original- ella quiso lucir por pertenecer a una firma solidaria que ayuda a los pacientes de fibrosis quística. Lo hizo también con el vestido confeccionado por mujeres de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida, posicionándose de forma clara con ellas. Y estamos seguros de que no va a ser la última vez que hablemos de este tipo de gestos, tanto en ella misma como en sus hijas. Y lucir estos pendientes con origen solidario ha sido un primer paso para la princesa Leonor.