La reina Sofía deslumbra de morado en los premios Hispania y Europa Nostra

La agenda de la Casa Real anunciaba hace unas horas que la reina Sofía estaría presente una vez más en la entrega de los premios Hispania Nostra y Europa Nostra correspondientes a los años 2018, 2019, 2020 y 2021. Tras una Semana Santa atípica, reapareció en un acto militar en El Pardo y ahora, diez días después, ha vuelto a figurar en un acto oficial como miembro de la familia real española.

Su majestad, en calidad de presidenta de honor, ha presidido la entrega de un total de 35 galardones para reconocer y fomentar las mejores prácticas relacionadas con la conservación del patrimonio, su gestión, investigación, educación y comunicación. Creado en 2002 por la Comisión Europa y Europa Nostra, el premio Unión Europea de Patrimonio Cultural es el reconocimiento más prestigioso en el campo del patrimonio y este año tuvo lugar en el Museo Sefardí de Toledo.

La última entrega de premios Hispania y Europa Nostra tuvo lugar en el monasterio de San Juan de Burgos el 25 de enero de 2018 y se reconoció a obras y actuaciones en el patrimonio de los tres años anteriores. Los galardones, que también fueron entregados entonces por doña Sofía, fueron prorrogados por la pandemia, pero finalmente ha sido posible la entrega de diplomas presencial después de cuatro años y con la Reina emérita.

El Museo Sefardí de Toledo fue el emplazamiento elegido para la ceremonia de este año debido a que uno de los premios ha sido otorgado al yacimiento arqueológico visigodo de Guarrazar, ubicado en el municipio toledano de Guadamur. Concretamente, se entregaron 19 premios Hispania Nostra a las buenas prácticas en la conservación del patrimonio cultural y natural, y 16 premios Europeos de Patrimonio y Europa Nostra. Todos los premiados en las distintas convocatorias pueden ser consultados en el comunicado de la Casa Real.

En las imágenes de la entrega de premios hemos visto a la reina Sofía sonriente y saludando enérgicamente a todos los galardonados con un apretón de manos antes de darles el diploma. Su actitud amigable y cercana, que no falta en los actos y eventos a los que acude o participa activamente, no ha restado protagonismo al estilismo que eligió para la ocasión. En pocas palabras, podemos decir que rompe por completo con el tipo de atuendo por el que se había decantado las últimas veces.

Si hace unos días la madre del rey Felipe apostaba por un vestido de color beis con estampado floral pequeño y lunares blancos, en un claro guiño a su nuera Letizia, ahora deslumbró en clave colorida y alegre. El estilo elegante, conservador y sofisticado de doña Sofía, el mínimo común denominador de su valioso fondo de armario, ha quedado a un lado en beneficio de un sorprendente traje de pantalón y chaqueta de color morado intenso que combinó con complementos y accesorios a tono.

Un conjunto de dos piezas de terciopelo brillante protagoniza el evento que preside luciendo una blusa satinada en verde oscuro, un chal ligeramente más claro que el traje, varias pulseras moradas, un collar a tono con el look y pendientes a juego.

No es la primera vez que la reina Sofía apuesta por el morado, pero dado el contexto de polémica que rodea a la familia real española desde hace unas semanas, verla con un estilismo tan vistoso y con una sonrisa como mejor complemento es, cuando menos, reseñable.

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