Arranca el jubileo de Isabel II: de su gran sonrisa al homenaje al duque de Edimburgo

Tras no aparecer por primera vez en la apertura del Parlamento debido a sus problemas de movilidad, tal como informó el palacio de Bucklngham, se desencadenaron todo tipo de rumores acerca de la salud de Isabel II. La imagen del príncipe Carlos, acompañado por la duquesa Camila y por el príncipe Guillermo -quien debutaba en el acto-, cumpliendo con uno de los actos más importantes de la agenda real, hizo saltar todas las alarmas sobre la soberana. Incluso hay quienes pronosticaban que ya no la volveríamos a ver en público durante muchos meses.

Sin embargo, la reina callaba la boca de todos solo unas horas después. El pasado viernes, Isabel II apareció en un acto matutino del Royal Windsor Horse Show, y este mismo domingo, por la noche, acudía al acto que se celebró por su Jubileo de Platino, arrancando así los festejos que conmemoran sus 70 años en el trono. Y lo cierto es que en su aparición Isabel demostró que todo va bien, pues estuvo durante todo el evento de lo más sonriente y simpática, aplaudiendo y disfrutando de una de sus grandes pasiones, los caballos.

Vestida de azul, la reina llegó al acto en coche y se apeó de él para andar ante las cámaras hasta el recinto. Llevaba un bastón como única ayuda para andar. Aunque en casa se ayuda también de la silla de ruedas, los expertos en realeza aseguran que la soberana no quiere que se la fotografíe de esa forma. Para ella es importante dar una imagen de fortaleza a pesar de sus 95 años. Y así lo hizo, luciendo de lo más arreglada con sus elementos insignia: el bolso de Launer London, los mocasines negros y el pelo peinado con unas ondas.

Aunque se esperaba que otros miembros de la familia real asistiesen al espectáculo del Royal Windsor Horse Show, finalmente la reina estuvo sola durante la celebración del acto. Sin embargo, alguien muy especial participó en la muestra ecuestre. Hablamos de su nieta, Lady Louise Windsor, la hija mayor de los condes de Wessex, quien rindió un homanaje a su abuelo, el duque de Edimburgo, conduciendo uno de sus carros. Louise, que ahora tiene 18 años, era la niña de los ojos del príncipe Felipe, y fue él quien le trasmitió su pasión por los caballos.

La gala contó con numerosos rostros conocidos y quizás el más sorprendente fue el de Tom Cruise, quien presentó una de las actuaciones. El actor estadounidense confesó que para él era un gran privilegio poder estar en las celebraciones del jubileo de la reina, "a la que admira y quiere". Por su parte, Helen Mirren, quien ganó un Oscar por interpretar a Isabel II en la película 'The Queen', se vistió de época para personificar a Isabel I, la reina virgen.

Una ausencia que preocupó a todos

Los peores presagios se desataban el pasado martes, pensando que la reina no se encontraría bien de salud, cuando no estuvo presente en la apertura del Parlamento de este año. La triste noticia para los británicos vio la luz a través de un comunicado enviado por la Casa Real a los medios: "La reina sigue experimentando problemas de movilidad episódicos y, después de consultarlo con sus doctores, ha decidido a regañadientes que no asistirá a la apertura del Parlamento mañana", rezaba la primera parte del mensaje. "Por petición de Su Majestad, y en acuerdo con las autoridades relevantes, el Príncipe de Gales leerá el discurso de la Reina en su honor y el Duque de Cambridge también estará presente", finalizaba el conciso mensaje que rápidamente generó todo tipo de especulaciones en redes sociales.

Este evento marca oficialmente el inicio de sesión del Parlamento del Reino Unido y el discurso de la reina es el momento más esperado del día por los británicos. Es una cita anual que Isabel II solo se ha perdido en dos ocasiones, en 1959 y 1963, cuando estaba embarazada del príncipe Andrés y el príncipe Eduardo, respectivamente.