El gran día de la princesa Estelle de Suecia: estrena retrato oficial y gafas

Este miércoles, la hija mayor de la princesa Victoria y el príncipe Daniel de Suecia, de tan solo 10 años, tenía un día de lo más ajetreado por delante, pues salían de Estocolmo a primera hora de la mañana. Estelle se dirigía junto a sus padres al castillo de Linköping, donde fue recibida a las 10 de la mañana por el gobernador del condado, Carl Fredik Graf, y su mujer, Anette.

Esta es la segunda misión que la primogénita de la princesa heredera, segunda en la línea de sucesión de la Corona sueca, tiene en el condado de Östergötland, donde es duquesa. La primera vez que la vimos ejerciendo de princesa aquí mismo tenía tan solo dos años e inauguraba, entre otras cosas, ‘El camino de los cuentos de hadas de Estelle’.

De lo más profesional a pesar de su corta edad, la princesa se mostraba de lo más segura y sonriente, posando para los fotógrafos con total naturalidad, con una blusa nueva en color blanco y de estampado de pájaros en color azul y falda a juego de Bonpoint. Un conjunto de lo más veraniego que combinó con zapatos de charol de la misma marca y una rebeca azul del mismo tono que los pajaritos.

Estelle estaba feliz y llegaba de la mano de sus orgullosos padres, que no le quitaban ojo de encima. Ya han pasado 10 años desde que la princesa recibió su regalo de bautizo, un recorrido de cuento de hadas en Takern, en Östergötland. Por tanto, este miércoles celebraba un pequeño aniversario junto a sus padres, como comentaba la directora de información de la corte sueca, Margareta Thorgren.

La primogénita de la princesa Victoria tenía esta mañana una apretada agenda por delante y descubría ya en el interior del castillo de Linköping un retrato suyo, pintado al óleo en Haga en 2015. Un cuadro que representa a la princesa cuando tan solo tenía 3 añitos y se sentaba, muy sonriente, en una silla de color rojo. Con vestido de color blanco con nido de abeja y un lazo en el pelo, este será un recuerdo que la pequeña podrá tener para siempre.

El gobernador de Östergötland, Carl Fredik, se mostraba de lo más entusiasmado con la visita de la pequeña Estelle: “Estamos muy orgullosos de tener a la princesa como nuestra duquesa y es un gran honor para nosotros recibir a parte de la familia real en nuestro condado”, confesaba en un comunicado de prensa.

La princesa heredera elegía para esta ocasión una chaqueta de Mayla en azul cielo y falda plisada en azul oscuro de H&M. Con bolso de Valentino y pendientes de Ebba Brahe, Victoria se vistió acorde a la ocasión; al igual que su marido, el príncipe Daniel, que optó por un traje en color azul marino con corbata también en azul. En un principio pudimos ver a Victoria luciendo zapatos de Gianvito Rossi en azul marino, a juego con su hija, que también iba combinada en los mismos tonos. Pero después madre e hija se cambiaron por unas cómodas zapatillas de deporte, ambas en blanco impoluto.

La visita continuó en una zona boscosa y ambas se decantaron por ser pragmáticas. La princesa Estelle se calzó sus Adidas y cambió la falda por un traje de chaqueta y pantalón en color blanco de Designer Remix, manteniendo el mismo top de Bonpoint y rebeca debajo del blazer.

Un día de lo más especial para la pequeña princesa, que fue la absoluta protagonista a falta de su hermano Oscar, de seis años. El pequeño de la familia no acudió a Linköping con su familia y, en su lugar, acudió a la escuela Lilla Kvikkjokk, donde está cursando el último curso de preescolar, situado en Estocolmo.