Qué pasa con todos los enseres personales que el rey Juan Carlos I tiene en Zarzuela
Al tratarse de cuestiones privadas, la Casa del Rey no informa oficialmente. El padre de Felipe VI pensó que se iba a Abu Dabi por poco tiempo y dejó "toda su vida", nos dicen, en palacio
Lo tiene todo en Zarzuela. Zapatos, relojes... y hasta ropa íntima. Cuando el rey Juan Carlos I supo que era inevitable irse del país, hizo una maleta para un tiempo corto, unos meses, acaso. Eso pensó. Pero la realidad es tozuda y ha terminado por imponerse.
Así que ahora el padre de Felipe VI ha instalado su residencia oficial en Abu Dabi y ha cancelado su última visita a España, prevista para estos días, a la espera de encontrar un momento más oportuno. Y, como decíamos, sus enseres personales siguen en el palacio de la Zarzuela.
“Una vida entera”, lo definen sus allegados, quienes recuerdan que se fue dejando todo atrás y que ese 'todo' allí sigue. Desde Vanitatis hemos preguntado a la Casa del Rey sobre si hay alguna intención de hacérselo llegar, al menos una parte, o de trasladar sus pertenencias a cualquier otro lugar, puesto que, ya se ha dicho, no volverá a vivir en palacio. Nos responden que, al tratarse de cuestiones privadas de don Juan Carlos, ellos no pueden responder a nuestras dudas.
Sabemos, eso sí, porque nos lo han contado desde su entorno, que la infanta Elena le ha llevado algunas cosas cuando ha viajado. Poco más. En Zarzuela queda todo: desde la ropa del día a día hasta los uniformes. Además, claro está, de sus trofeos de caza, medallas, copas...
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Su casa
Quienes le conocen no pueden concretar, pero nos dicen que es fácil hacerse una idea de lo que tiene allí. Contemos los años que ha vivido en Zarzuela e imaginemos lo que una persona de 84 años puede llegar a tener en su casa, desde los recuerdos más íntimos hasta el artefacto más insignificante. Todo se quedó en el palacio a la espera de que su dueño vuelva. Lo que no va a suceder, por mucho que le pese.
No sabemos, sin embargo, si estas cuestiones de logística entraron en las conversaciones que mantuvieron padre e hijo en la primera y única visita de don Juan Carlos a España. Aquella larga reunión de cuatro horas en Zarzuela que tuvo lugar el día 23 dio para mucho, según se ha publicado, aunque nadie ha podido entrar en detalles.
"Tocado"
Podemos contar, por las mismas fuentes, que algo no fue muy bien entre ellos y que don Juan Carlos “volvió tocado” a Emiratos. Poco más, aunque a la vista de la cancelación de su siguiente visita, anunciada a bombo y platillo para este pasado fin de semana, todo parece indicar que se pusieron algunas condiciones para que el rey emérito pueda volver, ya sea de forma puntual o definitiva.
Aunque la explicación oficial que él mismo ha dado a los suyos es política: quiere exculpar a su hijo y a Zarzuela de la cancelación de su viaje, nos dicen, y asegura que no viene por cuestiones políticas. Por tradición. El domingo 19, es decir, en menos de una semana, se celebran elecciones autonómicas en Andalucía. Y don Juan Carlos considera que su presencia en Galicia podría haber hecho pensar a la sociedad que apoya a un partido en concreto, esto es, que apoya al PP que gobierna en tierras gallegas. “El rey jamás participó en regatas en periodo electoral”, recuerdan. Y ahora tampoco quiere hacerlo.
"Seguirá volviendo"
Sea como sea, lo que dejó claro su anterior visita es que puede volver al país del que fue jefe de Estado durante décadas: “Eso de que no iba a volver nunca ya no se puede decir y a él le pesaba porque no era cierto y quería demostrar que puede volver y que seguirá volviendo”. Su retorno, con todo, no será a Zarzuela.
Existe la posibilidad de que decida volver y quedarse en España, esa es su voluntad última, y por eso quedó reflejado en el comunicado que mandó Zarzuela tras la reunión de los dos reyes. Esta frase lo dejaba entrever: “Su decisión de organizar su vida personal y su lugar de residencia en ámbitos de carácter privado, tanto en sus visitas como si en el futuro volviera a residir en España, para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible”. Cuando vuelva, eso sí, deberá hacerlo de forma mucho más discreta y “sin avisos previos de algunos de sus amigos”, nos comentan.
Las finanzas, clave
Quienes lo conocen y hablan con él señalan las finanzas como uno de los principales escollos para instalarse en España. Porque su hijo le quitó la asignación y consideran que así lo condenó a la clandestinidad económica. No puede pagar nada de su bolsillo y si sus amigos le invitan, pueden investigar todos esos fondos, como hemos visto que ha sucedido en las últimas semanas, que se ha abierto una investigación sobre sus cacerías y los regalos recibidos tras su abdicación.
La cuestión, queda claro, es compleja. Entre tanto ruido, él recuerda que lo dejó casi todo en su casa, que para él sigue siendo Zarzuela. Y no sabe si tendrá la oportunidad de recuperarlo.
Lo tiene todo en Zarzuela. Zapatos, relojes... y hasta ropa íntima. Cuando el rey Juan Carlos I supo que era inevitable irse del país, hizo una maleta para un tiempo corto, unos meses, acaso. Eso pensó. Pero la realidad es tozuda y ha terminado por imponerse.
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