La noche de chicas de la reina Letizia para ver a Marion Cotillard en el Teatro Real

Una noche en la ópera. Sí, es el título de una conocidísima y aclamada película de los hermanos Marx, pero también ha sido uno de los planes que la Reina ha hecho esta semana. Porque el pasado martes doña Letizia no quiso perderse a Marion Cotillard en el Teatro Real, donde la actriz francesa interpreta desde el 7 de junio a la heroína Juana de Arco. Y lo hizo justo el día en el que no había ninguna actividad oficial programada en su agenda, por lo que fue sin duda el mejor colofón para un día libre, al menos de actos públicos.

Se trata de un plan estrictamente privado y del que disfrutó sin la compañía de don Felipe. Tan discreta fue su presencia en el Teatro Real -aunque damos por hecho que la acompañaba el correspondiente equipo de seguridad- que no había trascendido hasta ahora su paso por el emblemático edificio, al que es tan aficionada. Pero, claro, era inevitable que algunos espectadores se dieran cuenta de que junto a ellos estaba o pasaba la mismísima reina Letizia, por lo que han sido las redes sociales las mejores 'chivatas' para conocer lo que hizo la esposa del rey Felipe VI el martes por la noche.

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Desde luego, eran tres ingredientes que tenían difícil no llamar la atención de doña Letizia. Si ya de por sí es amante de la programación del Teatro Real, el hecho de que la protagonista de la obra que se representa estos días sea Marion Cotillard, ganadora de varios César -los premios del cine francés-, un Oscar y un Globo de Oro, e interpretando nada menos que a Juana de Arco era suficiente reclamo para que la Reina no dudara en dejar el palacio de la Zarzuela el martes por la noche y disfrutar de esta obra musical.

Lo que sabemos gracias a las redes sociales de los espectadores que la vieron es que doña Letizia no se escondió en ningún momento, aunque sí salió con algo de prisa del Teatro Real, quizá precisamente por evitar que la reconociera demasiada gente y se formara algún tumulto a su alrededor. Los testigos que la vieron aseguran a Vanitatis que no se veía por ningún lado a sus guardaespaldas, por lo que suponemos que estaban bien mezclados con el resto del público y pasando totalmente desapercibidos, ya que siempre, sin excepciones, tiene que llevar seguridad por su cargo institucional, aunque se trate de un plan privado, como la velada en el Teatro Real.

Eso sí, los mismos testigos aseguran que la acompañaba un grupo de "tres o cuatro mujeres de su edad", que salieron igual de rápido que ella del edificio. Y aunque se nos vienen muchos nombres a la cabeza, de esos que pertenecen al círculo íntimo de doña Letizia, los testigos no han podido identificar a ninguna. Lo que está claro es que, por la hora y por la prisa que se dio la Reina para salir, esta vez no pudo o no quiso saludar y felicitar a Marion Cotillard al finalizar la función, algo que suele hacer en otras obras, aunque no asista, como en esta ocasión, de forma oficial.

Precisamente, el hecho de que decidiera pasar la noche del martes fuera del palacio de la Zarzuela y en pleno centro de Madrid pero de forma privada hace que desde Casa Real no se aporten datos. Es un plan de carácter personal y, como tal, queda para ella, el teatro y Marion Cotillard.

Así, Letizia ha repetido un patrón que suele seguir cuando en la capital se acogen este tipo de de espectáculos, con pocas funciones y actores o actrices de renombre, optando por acudir a la representación en una de las últimas funciones. En el caso de 'Juana de Arco en la hoguera', la del martes también era una de las últimas, puesto que solo quedan la de jueves y viernes, cuando Marion Cotillard se despedirá de Madrid y del Teatro Real. Así evita la expectación que suele crearse en la función final. Y, desde luego, también hubiera sido arriesgado asistir el mismo día del estreno, el pasado 7 de junio, cuando multitud de nombres conocidos, como los duques de Huéscar, Hiba Abouk o Pedro Almodóvar acudieron como espectadores, con la consiguiente nube de fotógrafos cubriendo todas las entradas para que ningún vip se escapara de los objetivos.

Lo que desconocemos es si entró con la obra ya empezada, algo que también suele hacer en algunas ocasiones para poder pasar desapercibida gracias a la falta de luz en el patio de butacas. Aunque en este caso, por las características de la producción, no es algo que encaje mucho. Sí es cierto que en este tipo de situaciones no es raro que se escape alguna foto realizada por algún espectador espontáneo, lo que -al menos hasta ahora- no ha sucedido. Pero hay que tener en cuenta que la disposición de los palcos del Teatro Real permite que una persona -sea la Reina o no- pueda acceder a su localización sin que prácticamente nadie la vea.

Es la segunda vez que disfruta de un plan de este tipo en el mismo escenario desde que estalló la pandemia y quedara parcialmente paralizada la vida cultural del país, puesto que fue la forma en la que los Reyes y sus hijas celebraron el Día de la Madre en 2021. Aunque, a pesar de la situación sanitaria, no han querido faltar a este tipo de citas. En 2020, quisieron animar a la ciudadanía a volver a las salas de cine y los Reyes dieron ejemplo disfrutando de ellos mismos de una película en pantalla grande. También habían querido, unas semanas antes, apoyar la oferta cultural de Madrid junto a sus hijas en los Teatros del Canal, en junio de 2020.