La infanta Cristina y su difícil encaje en España: más lejos de volver que nunca

Si algo tiene claro la infanta Cristina es que por mucho que quiera no puede volver a España. No al menos a vivir. La hermana del rey Felipe VI mantiene su residencia en Ginebra y así será durante bastante tiempo, y eso que tiene muchas ganas de volver a nuestro país, donde están su familia, sus amigos y casi toda su vida.

Irse a vivir a Ginebra fue una huida hacia adelante durante la crisis del caso Nóos, algo que impactó en su vida de una forma brutal. Ahora, desde que su marido la ha dejado por otra mujer, la infanta Cristina no tiene motivos para seguir en Ginebra. Cierto es que allí en Suiza, en la ciudad financiera, tiene un buen trabajo. Pero dentro de poco ya no le quedará nada más que eso.

La Infanta tenía un plan: había previsto crear un futuro junto a Iñaki Urdangarin en el país transalpino. La ruptura del matrimonio ha sido un golpe fatal para ella, quien se ha visto en la ciudad suiza sola con su hija Irene. Cabe recordar, porque es un detalle importante, que la joven ha empezado este año su último curso de bachillerato y que, a partir de ese momento, Irene pude volar sola.

Si esto sucede, y la única hija del matrimonio Urdangarin de Borbón decide estudiar en otro país extranjero, la Infanta se quedaría en absoluta soledad en Suiza. Allí tiene su trabajo y también amigos, nos dicen quienes la conocen, un círculo con el que hace planes. Pero nada es parecido a lo que tiene en España, en especial en Barcelona, donde ha vivido casi toda su vida.

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Sea lo que sea, la exduquesa de Palma es consciente de que su encaje institucional en nuestro país es muy complicado. Antes de nada debería retomar su relación con su hermano, el rey Felipe VI, con quien, pese a haberse visto este verano unas pocas horas, todavía no ha podido restablecer relaciones.

"Nadie la molestará"

Así que por el momento mantiene su residencia en Suiza. “Allí está bien, sabe que nadie la molestará y por ahora no vuelve, no puede ni planteárselo”, nos dice una fuente cercana a la hija de los reyes eméritos. Con todo, la veremos cada vez más en España porque esa es su intención: viajar a nuestro país cada vez que pueda.

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Una muestra de cómo será su vida a partir de ahora es lo que ha sucedido este verano. La hija mediana de don Juan Carlos I y Sofía ha pasado casi todo el verano en España. Estuvo a finales de mayo en Mallorca para asistir a la boda de Mafalda de Bulgaria; estuvo en junio y julio, trabajando en varios puntos del país, desde Barcelona hasta Santander; y aprovechó estas visitas para quedarse más días e irse de vacaciones con alguno de sus hijos.

Bidart, la sorpresa

Además, por primera vez desde hacía años, la infanta Cristina estuvo en Palma de Mallorca, en concreto en el palacio de Marivent. A finales de julio se alojó en la residencia real con su madre, su tía Irene y su hermana, además de los hijos de ambas. La visita, que sorprendió a todos, dejó claro que las intenciones de la Infanta son volver a formar parte de la familia a la que abandonó durante un tiempo por apoyar a su marido.

Tras pasar unos días en Palma y otros en Sotogrande, la infanta Cristina decidió que pasaría unos días en Bidart, algo que Urdangarin ni siquiera sospechaba. No hasta que se lo comunicó la Infanta. Y cuando lo supo, nos dicen, no fue una buena noticia para él. La presencia de la infanta Cristina junto a su exmarido en las playas en las que habían sido tan felices sorprendió a muchos, aunque fue algo que se había hablado antes con los miembros de toda la familia. Sus hijos, claro, sabían perfectamente que su madre iba a ir hasta la costa vascofrancesa.

De boda en EEUU

Como vemos, la infanta Cristina tiene sus raíces aquí y aquí seguirá teniéndolas porque esa es su voluntad. Además de sus visitas a España recordemos que ha estado también en Estados Unidos en las dos bodas de los sobrinos Urdangarin, pero ha sido como estar aquí porque ha ido con su familia política (o su ex familia política), con quien mantiene muy buena relación y con quienes se ha empeñado en viajar. “Este viaje -nos dicen- ha sido una decisión personal de Cristina. Su padre le pidió que fuera antes a Abu Dabi, pero ella le dijo que no, que quería ir a las bodas americanas”.

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Tras su salto al charco, se fue a visitar a su padre, un viaje que el rey Juan Carlos hubiera preferido recibir antes, decíamos, pero por el empeño de la propia Cristina, que quería estar en Estados Unidos fuera como fuera, fue más corto de lo planeado. Así, estuvo menos días de los que su progenitor habría preferido.

Vuelta a Ginebra

Y vuelta Ginebra, a finales de agosto, después de no haber pisado Suiza durante muchas semanas. La infanta Cristina volvió a finales del mes porque su hija Irene empezaba el colegio el lunes 29 de agosto. Y a ese nuevo viaje se sumaron sus hijos Juan y Miguel, su hermana Elena y, según 'Cierre Digital', su padre, el rey emérito, quien trabaja con su hija los términos del divorcio de Urdangarin.

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No podemos concretar cuándo volverá la infanta Cristina a España. Sí que podemos decir que será pronto y que será en Barcelona, donde tiene todavía su segunda residencia.