La familia real acompaña a Isabel II a Westminster Hall: todos los detalles del encuentro

Con puntualidad británica a las 14:22 h (hora británica) daba comienzo el traslado del féretro de la reina Isabel II desde el palacio de Buckingham hasta Westminster Hall. Un cortejo fúnebre que recorrería las principales calles de Londres en las que el nuevo rey, Carlos III, encabezaba esta comitiva junto al príncipe Guillermo y al príncipe Harry, que han caminado a pie detrás del féretro. Un trayecto de 38 minutos que llegaba pasadas las 15 horas (hora local) a Westminster.

El ataúd de la reina salía del palacio seguido a pie por el rey Carlos III, que caminaba junto a su hermana, la princesa Ana, además del príncipe Andrés y el príncipe Eduardo. Tras ellos, el príncipe de Gales y el duque de Sussex. Los hermanos caminaban juntos uno junto al otro, justo detrás de su padre, acompañando el féretro de la reina junto a toda la comitiva.

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El ataúd estaba siendo transportado por un carro de armas de la artillería a caballo de la tropa del rey, una unidad montada que se utiliza para grandes ocasiones como esta. Un grupo de escolta formado por miembros del 1º Batallón de la Guardia de Granadier.

La princesa de Gales, al igual que la duquesa de Sussex y la nueva reina consorte, seguían este cortejo fúnebre separadas de sus parejas, porque este es un momento familiar en el que ellas se quedan en un segundo plano. Viajaban en coche detrás de la comitiva a pie, que ha salido del palacio en torno a las 14:45 horas (hora local). En el primer coche iban Kate Middleton, nueva princesa de Gales, junto a la reina consorte, Camila Parker. En un segundo coche, la duquesa de Sussex y la condesa de Wessex. Todas ellas vestidas de riguroso luto, Kate y Meghan han hecho un homenaje a la monarca británica luciendo joyas regalo de Isabel II.

Los tambores marcaban el ritmo de esta procesión a un ritmo de 75 pasos por minuto, típicamente reservado para los funerales. Todo estaba planeado con solemnidad mientras recorrían The Mall en este último viaje de la reina desde el palacio de Buckingham.

La procesión llegaba a Westminster Hall una vez que han llegado los coches con las damas reales de la familia británica. Podíamos ver bajar primero a Camila, seguida de Kate. Tras ellas, Sophie de Wessex y Meghan Markle. Poco después de las tres de la tarde, hora local, llegaba el féretro con los restos de la monarca británica a Westminster Hall, donde ha tenido lugar una misa de 20 minutos de duración muy emotiva en la que se ha podido ver a la princesa Eugenia llorando por la muerte de su abuela. El ataúd de la reina ingresaba al Westminster Hall mientras el coro de la abadía de Westminster y el coro de la Capilla Real de Su Majestad, el palacio de St James, cantaban el Salmo 139.

Una misa ofrecida por el arzobispo de Canterbury, decano de Westminster, David Hoyle. Tanto la reina consorte como la condesa de Wessex y la princesa de Gales se han mostrado muy emocionadas en esta misa funeral llevada a cabo en Westminster Hall. Tras la bendición del arzobispo Welby para cerrar el breve servicio, una espada golpeaba el suelo con firmeza dos veces, lo que marca el comienzo de la vigilia que durará hasta el próximo lunes 19 de septiembre a las seis y media de la mañana, hora local.

Durante los próximos cuatro días, los guardias custodiarán el féretro de la reina Isabel en vigilia, día y noche. El ataúd con los restos de la reina permanecerá cerrado sobre una plataforma elevada, conocida como catafalco, y será custodiada las 24 horas del día para que todos los visitantes que quieran puedan pasar a darle su último adiós. El ataúd estará cubierto con el Estandarte Real y coronado con la Corona del Estado Imperial, el orbe y el cetro.

Políticos de todo el Reino Unido han acudido a Westminster Hall para conmemorar la vigilia que ha comenzado tras el responso en honor a la reina. La primera ministra, Liz Truss, y el líder de la oposición, Keir Starmer, han estado el uno junto al otro, vestidos de negro y con aspecto solemne. El rey Carlos y la consorte, Camila, han abandonado Westminster Hall con gritos de ‘God Save the King’ de parte de la multitud allí reunida.

Meghan y Harry han decidido andar juntos de la mano tras el pequeño responso a su salida de Westminster, mientras el resto de parejas reales guardaba el protocolo y andaba uno junto a otro sin tocarse. A partir de esta tarde, a las cinco (hora local), el pueblo británico podrá despedirse de su monarca hasta el próximo lunes, cuando tendrá lugar el funeral de Estado en la abadía de Westminter, hasta donde se trasladará el féretro con una pequeña procesión a las seis y media de la mañana. El funeral, en cambio, será a las once de la mañana y se espera que acudan muchos representantes de las casas reales de toda Europa y algunos mandatarios. Habrá dos minutos de silencio en memoria de la monarca británica que ha ostentado el cargo durante 70 años.

El palacio de Buckingham se ha quedado vacío, tras días llenos de gente en sus inmediaciones. Ahora, las personas que deseen hacer cola para despedirse de Isabel II deben dirigirse al puente de Blackfriars. Hasta el palacio se trasladaban de nuevo, ahora sí todos en coche, los miembros de la familia real. Ha sido una tarde emocionante en la que hemos podido ver de nuevo caminar juntos a los príncipes Guillermo y Harry, que han dejado sus diferencias atrás para este histórico momento. Para su vuelta al palacio, la princesa de Gales ha viajado en coche con su marido, al igual que han hecho los duques de Sussex.

Mientras el rey Carlos, su hijo el príncipe de Gales y la princesa Ana han podido hacer su salido militar con la mano en la cabeza cuando llegaba el féretro de la reina, el príncipe Harry y el príncipe Andrés han bajado sus cabezas cuando acompañaban al ataúd, puesto que ya no forman parte de la 'working royal family' y han sido despojados de sus títulos militares.