El debut de Amalia de Holanda vestida de lentejuelas en una cena del Consejo de Estado

La princesa Amalia comienza a sus 18 años a tener más presencia institucional junto a sus padres y este miércoles por la noche acompañaba a los reyes de Holanda a una cena de gala con el Consejo de Estado. Lo ha hecho vestida muy elegante para la ocasión, con un vestido largo plisado, con escote cruzado en forma de pico y manga larga que le sentaba muy bien. Un diseño de estreno de la firma Mac Duggal en color azul con aplicación de lentejuelas muy elegante.

El vestido se vende online junto a la siguiente descripción: “Satisfaga sus fantasías de princesa actuales con este vestido de ensueño”. Una publicidad que le viene que ni pintada a una princesa real, que ha elegido este diseño fabricado en tul muy fino con rayas de lentejuelas que provocan el efecto óptico de parecer más separadas a medida que la falda se llena. El vestido tiene un corpiño que va rematado a la cintura con un cinturón de cuentas enmarcándola y cuenta con mangas abullonadas hasta los codos y hombreras. Un diseño evasé que brilla y que cuenta con escote drapeado y amplia falda, que es un gran acierto de la princesa. Su precio es de 635 euros.

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Además, se recogió el pelo como también hiciera su madre, que repitió modelito para esta cita, luciendo un vestido con la falda en color amarillo con estampado floral en azul y la parte superior en azul, un diseño de Claes Iversen que ya le habíamos visto en 2016. Por su parte, el rey Guillermo también se vistió de gala y llevó pajarita a juego con su traje negro.

Los tres miembros de la familia real holandesa fueron los encargados de ofrecer esta cena a los miembros del Consejo de Estado y era esta la primera vez que la princesa organizaba una cena bienal en el palacio Noordeinde de La Haya. La heredera ocupó un puesto en el Consejo de Estado, precisamente, a finales del año pasado, tan solo un día después de cumplir su mayoría de edad. Acompañaba a su padre, que la introdujo en esta tarea que fue su primera ceremonia oficial como princesa.

El Consejo de Estado es un asesor independiente del Gobierno y el Parlamento en el que el rey es el presidente del Consejo y la princesa es miembro del Consejo y de su división consultiva desde que cumplió los 18 años, al igual que su madre. Amalia tiene junto a Máxima una plaza en la división de asesoramiento, donde adquiere conocimientos sobre legislación y derecho constitucional y se prepara para su futuro papel como reina. Pues esta división consultiva asesora sobre todos los proyectos de ley del Gobierno, sobre el memorándum presupuestario y los proyectos de ley presentados por los diputados y revisa la política climática del Gobierno basándose en la ley del clima. La princesa y la reina pueden asistir a las reuniones, aunque no tienen derecho a voto.

Ahora que la princesa ha comenzado sus estudios universitarios en Ámsterdam de Política, Psicología, Derecho y Económicas (PPLE), ha querido trasladarse hasta La Haya para acompañar a sus padres en esta cena que supone su debut y lo ha hecho por todo lo alto, con vestido de lentejuelas.

Recientemente también conocíamos que, a finales de enero y principios de febrero de 2023, el rey Guillermo y la reina Máxima visitarán la parte caribeña del reino. Pero no irán solos, viajará con ellos su hija mayor, la princesa heredera, que realizará así su primer viaje oficial conociendo los países de Aruba, Curazao y San Martín, además de las islas que componen los Países Bajos del Caribe, que son Bonaire, San Eustaquio y Saba.

Amalia tiene 18 años desde el pasado mes de diciembre y será este su primer viaje oficial, puesto que a pesar de que su madre era la regente en caso de enfermedad del rey Guillermo solo hasta que la heredera cumpliera la mayoría de edad, sus padres no lo han querido así hasta ahora, pues han preferido que se centre en sus estudios. Precisamente, cuando la Casa Real holandesa confirmaba que Guillermo se estaba recuperando de una neumonía y no podía viajar por prescripción médica el pasado 6 de septiembre a Estados Unidos, donde tenía previsto realizar un viaje oficial junto a su mujer, era Máxima quien acudía en solitario hasta Texas y California y no su hija Amalia.