La reina Letizia, con tocado con velo y pendientes de Chanel en el funeral de Isabel II

De riguroso luto, como marca el protocolo, doña Letizia ha asistido junto a don Felipe al funeral de Estado de Isabel II, celebrado este lunes en la abadía de Westminster. Mientras el Rey vestía uniforme y llevaba la insignia de la Orden de la Jarretera, de la que es caballero desde 2017, cuando la difunta soberana le otorgó la dignidad durante la visita de Estado que realizaron a Reino Unido, la Reina se decantaba por un estilismo sobrio, en el que llamaba la atención la elección de joyas discretas, nada que ver con otras invitadas royals como Máxima de Holanda o incluso doña Sofía.

La reina emérita tiraba la casa por la ventana en cuestión de joyas, luciendo un collar de perlas del que colgaba el pendentif de rubíes de su madre, la reina Federica, así como un broche de perlas que perteneció a la infanta Isabel, la Chata. Todo lo contrario que doña Letizia, quien apostaba únicamente por unos pendientes que guarda en su joyero desde 2016. Ni broches ni collares ni nada más, solo los pendientes, un diseño de Chanel, de la colección Plumme, realizados en oro blanco y diamantes.

El vestido nos ha resultado familiar desde que se lo hemos visto, y tiene su explicación. Es idéntico al que llevó hace unos meses cuando visitó precisamente Reino Unido y compartió acto con el entonces príncipe Carlos en el castillo de Auckland. Solo cambia el color, ese era burdeos y este negro. Se trata de un diseño de Carolina Herrera hecho a medida, de corte sencillo, manga larga, cuello redondo, largo midi y falda ligeramente de vuelo. La única decoración que lleva son tres botones en ambos hombros. Le ha incorporado un cinturón, de piel negra, para remarcar silueta.

Como decíamos, un estilismo muy sobrio, sin apenas joyas, quizás para darle protagonismo al tocado, firmado por Cherubina. Se trata de un diseño tipo casquete moldeado a mano sobre busto, forrado y confeccionado en tejido de bouclé con gran lazada entretelada decorativa en su parte posterior y velo fruncido envolvente antiguo. El modelo tiene el nombre de Elisabeth (¿guiño a Isabel II?) y un precio de 250 euros. Sigue disponible en la web de la firma sevillana.

En cuanto a los complementos, doña Letizia ha lucido unos nuevos salones de Manolo Blahnik, modelo BB 105. Tiene unos muy parecidos, aunque con piel de serpiente, en cambio estos son lisos. Les ha añadido, como suele hacer ahora con todos, la plataforma para hacerlos más cómodos debido a la metatarsalgia crónica que sufre. Lucía, además, un bolso pequeño, estilo Jackie Kennedy, de Armani, que estrenó en 2016, así como guantes de piel.

Desde la Casa Real española se ha comunicado que tanto los Reyes como los eméritos han sido invitados a una ceremonia religiosa que habrá previa al sepelio en el castilo de Windsor. "Sus Majestades los Reyes han aceptado la invitación, así como la reina Sofía. La imposibilidad de abandonar el Castillo de Windsor hasta que finalice dicha estancia condicionará la posibilidad de que SM la Reina pueda asistir, por la necesidad de tomar a tiempo el vuelo regular hacia Nueva York. El rey Juan Carlos ha declinado la invitación para acudir al Castillo de Windsor", explican desde Zarzuela.