Kate, Guillermo y el broche final en Boston: de la gargantilla de Lady Di a la sorpresa de Beckham

Este pasado viernes por la noche, el príncipe y la princesa de Gales vivieron su gran momento en la gala de la segunda entrega de los Earthshot Prize, que tuvo lugar en el MGM Music Hall en Fenway. Se trata de unos galardones que intentan concienciar al mundo de la importancia de cuidar el medioambiente. Existen categorías distintas, como proteger y restaurar la naturaleza, limpiar el aire, revivir los océanos, construir un mundo sin residuos y arreglar el clima. El ganador de cada categoría recibió un millón de euros para ayudar a que el proyecto salga adelante.

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R. R.

El evento supuso el broche final de la gira que la pareja ha realizado esta semana por Estados Unidos.

El príncipe y la princesa de Gales fueron recibidos como dos estrellas de Hollywood. Multitud de personas congregadas en los alrededores del recinto vitorearon y lanzaron gritos de apoyo a la pareja cuando esta salió de su Range Rover híbrido, un vehículo que fue especialmente elegido para adaptarse al enfoque ecológico de su viaje. Los dos caminaron por la alfombra verde, deteniéndose varias veces para hablar con otros invitados, antes de ingresar al lugar, donde fueron recibidos con una ovación en pie por parte de los demás asistentes.

Una vez más, Kate Middleton deslumbró a todos los asistentes con su look. Si el año pasado se rindió a un vestido de diosa griega, este año apostó por uno verde con los hombros descubiertos. Se trató de un diseño alquilado a un precio muy asequible perteneciente a la marca Solace London. Si bien el coste de la prenda fue mucho más barato que el de las piezas de alta costura que normalmente viste, la joya que la princesa de Gales lució en su cuello fue la pieza que acaparó todas las miradas. Se trataba de una impresionante gargantilla de diamantes y esmeraldas que una vez perteneció a su difunta suegra Lady Di y cuyo valor se estima que ronda los 15 millones de dólares. La joya fue un regalo de Isabel II a Diana, heredada de la reina María.

Diana de Gales usó la gargantilla en varias ocasiones, incluso combinándola con un vestido verde con hombros descubiertos, al igual que Kate, cuando asistió a un evento en Londres en 1993. Sin embargo, es quizás más recordada por ser usada por Diana en su cabeza, a modo de diadema, durante su gira por Australia de 1985 junto al entonces príncipe Carlos.

Kate Middleton completó el look con un par de pendientes de diamantes y esmeraldas, de Asprey, cuyo valor, según estima 'Daily Mail', está en torno a los 10.500 euros, y unos salones de purpurina dorada de Gianvito Rossi que ya había usado en algunas ocasiones, por ejemplo en una recepción en las Bahamas durante la gira caribeña en marzo de este año.

Por su parte, el príncipe Guillermo lució un elegante esmoquin negro, con una chaqueta de terciopelo azul marino oscuro, una pajarita negra y un reloj Omega.

Una vez dentro, se les unieron los miembros del consejo de Earthshot, John Kerry, la Sra. Naomi Yamazaki, Hindou Ibrahim e Indra Nooyi, así como la directora ejecutiva del programa, Hannah Jones.

Una de las grandes sorpresas para Kate y Guillermo fue la asistencia de David Beckham. Ambos se mostraron muy emocionados al verlo. El hijo de Carlos III es conocido de Beckham desde hace mucho tiempo gracias a su papel como presidente de la Asociación de Fútbol de Inglaterra.

A Beckham se le unieron multitud de rostros conocidos como los de Annie Lennox, Shailene Woodley y Rami Malek, Ellie Goulding o Halle y Chloe Bailey.

Uno de los momentos más esperados fue cuando el príncipe Guillermo subió al escenario para pronunciar su discurso, en el que agradeció a la gente de Boston por darle una bienvenida tan cálida al Premio Earthshot antes de rendir homenaje a John F. Kennedy, cuya hija Caroline y su nieto Jack Schlossberg fueron invitados a la gala.

El príncipe de Gales instó a los asistentes a inspirarse en los ganadores y finalistas presentados durante el evento para encontrar sus propias formas de abordar el cambio climático.