El argumento de Buckingham para que Meghan aguantara el trato de la prensa: los antecedentes de Lady Di y Kate Middleton

Desde el pasado día 8 en el que se emitieron los tres primeros episodios en Netflix sobre el documental de Harry y Meghan, ríos de tinta se han escrito sobre su contenido. Precisamente, en dicho documental el príncipe Harry asegura que en Buckingham asumían que Meghan debía pasar por el acoso de la prensa al igual que lo habían sufrido otros miembros, como le ocurriera a Kate Middleton o a su propia madre, Diana de Gales.

En varios puntos de este show, Harry parece apuntar a su hermano Guillermo cuando comenzó a difundirse la noticia de su relación con Meghan en 2016. En el documental, el duque de Sussex afirma que la actitud de otros miembros de la familia real británica fueron las siguientes palabras: “Mi esposa pasó por esto, ¿por qué la tuya debería recibir una atención especial?”.

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Palabras que insinúan que podría ser el príncipe de Gales quien estuviera detrás, quien precisamente ha sufrido en múltiples ocasiones el acoso de los paparazzi hasta el punto en el que este mismo año se hacía viral un vídeo grabado en Sandringham en el que se mostraba muy enfadado con un paparazzi.

Un vídeo que el fotógrafo Terry Harris sacaba el pasado mes de junio a la luz, pero cuya fecha de grabación fue en enero de 2021, cuando la familia salía a montar en bici con sus hijos en las inmediaciones de su casa. Guillermo, totalmente indignado, arremetía contra este paparazzi, al que acusó de estar “acechando por aquí, buscándonos a nosotros y a nuestros hijos. Estoy dando un tranquilo paseo en bicicleta con mis hijos un sábado”.

Más fuera de sí de lo habitual, el príncipe de Gales le dice al fotógrafo que es “indignante, asqueroso” y le recrimina su comportamiento. Un atentado a su intimidad en el que no se ve a Kate Middleton, pero sí se la puede escuchar. Al alejarse se oye decir a Guillermo: “Gracias por arruinarnos el día… Pensé que ya habían aprendido”, debido a que la prensa británica ya no puede comprar imágenes invasivas de la realeza ni sus hijos, aunque a veces sí se publican en otras partes del mundo.

No es la primera vez que Meghan Markle o el príncipe Harry se quejan del acoso de la prensa. Hace poco sabíamos que el duque de Sussex había preparado una macrodemanda contra el grupo editorial al que pertenece ‘Daily Mail’ y que tiene a varios medios vetados de sus actos. Hace un par de años, Meghan se quejaba sobre el diferente trato que la prensa británica le dispensaba a Kate Middleton respecto a ella. Alegando que si su cuñada recibiera el mismo trato en la prensa británica, en palacio nadie lo toleraría y se tomarían cartas en el asunto.

Pero se olvidaba Meghan de que Kate sufrió un acoso demoledor al principio de su relación con el príncipe Guillermo, llegando a tener hasta 30 fotógrafos a la puerta de su apartamento en Chelsea el día de su cumpleaños que la seguían. Incluso, la mujer del príncipe Guillermo tuvo que aguantar que algunos paparazzi la llamaran ‘bitch’ (puta, en inglés), intentando provocar alguna reacción en ella como ya habían hecho con Diana. Cuenta en un libro Tina Brown que “Kate no recibió ayuda oficial del palacio para defenderse de los fotógrafos y equipos de televisión que la esperaban a la salida del trabajo”.

La entonces novia del príncipe Guillermo vivió una situación con la prensa muy desagradable que incluso se dice que provocó su ruptura temporal con el que hoy es su marido. Una invasión a su intimidad que le resultó una presión demasiado extrema y que la llevó a sentirse muy agobiada. Pero 20 años después del inicio de su noviazgo, Kate ha conseguido el respeto de la prensa, aunque a día de hoy a veces también tiene que leer titulares desagradables.

Es cierto que la prensa británica está que arde contra los duques de Sussex, pero precisamente porque critican lo que ellos consideran esa doble moral de acusar a los medios de invadirles en su intimidad y después, previo pago de 100 millones de dólares, dejar pasar a las cámaras de Netflix al interior de su hogar y mostrar fotografías íntimas de su noviazgo y posterior matrimonio con sus hijos, Archie y Lilibet.

El mismo príncipe Guillermo, muy enfadado, emitía un comunicado de prensa cuando aún era novio de Kate pidiendo que cesara el acoso contra su novia. Tanto Guillermo como Harry están muy sensibilizados con este tema, que llevó a su madre Diana a morir en un accidente de tráfico en París cuando era supuestamente perseguida junto a su novio Dodi Al-Fayed por un grupo de paparazzi.

Diana se vio sometida a muchísima presión y aún podemos recordarla esquiando con sus hijos cuando eran niños acercándose a las cámaras pidiendo, casi rogando, un poco de privacidad.

En el documental, Meghan insinúa que Buckingham cooperó en la siembra de “historias obscenas” en los medios de comunicación, que querían “destruirla”. Palabras que recoge la prensa británica y que aluden a que, según Harry, le insinuaron por qué Meghan debía recibir un “tratamiento especial” diferente al de sus propias esposas, que también tenían que lidiar con la prensa.

Harry y Meghan calificaban en Netflix su anuncio de compromiso en 2017 como un “reality show orquestado” en su tercer capítulo, en el que aparece una imagen de una gran maraña de fotógrafos que insinúan que persiguen sus pasos y realmente son imágenes del estreno de la película de Harry Potter o incluso del exabogado de Donald Trump en Nueva York, Michael Cohen, al salir de su casa para comenzar su condena por evasión de impuestos en mayo de 2019.