El curioso (y acertado) truco estilístico de Letizia en el funeral de Constantino de Grecia
Los Reyes de España han asistido la mañana de este lunes al funeral del rey Constantino, tío materno de don Felipe, en la catedral Metropolitana de Atenas
La realeza mundial se ha reunido este lunes en Atenas para dar el último adiós al rey Constantino. A pesar de no ser ya una monarquía en el trono, los griegos mantienen lazos de sangre, y de amistad, con la mayoría de casas reales existentes, de ahí que el funeral del hermano de doña Sofía se haya convertido en un lugar de encuentro de todos ellos. Los Borbón Grecia han hecho casi pleno para despedir a su querido tío Tino, faltando únicamente la princesa Leonor y la infanta Sofía, quienes no han viajado hasta la capital.
Media hora antes de las 11:00 de la mañana, don Juan Carlos, agarrado de su bastón, y doña Sofía llegaban a la catedral Metropolitana de Atenas, la misma en la que se casaron, acompañados por sus dos hijas, las infantas Elena y Cristina, y los hijos de estas: Froilán y Victoria Federica Marichalar y Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarin. Iba con ellos, también, la princesa Irene de Grecia, hermana de la emérita y del difunto. Don Felipe y doña Letizia hacían su llegada más tarde, junto a miembros de otras familias reales.
Eran recibidos, en las puertas del templo, por el príncipe Pablo, actual jefe de la Casa Real tras la muerte de su padre el pasado martes, entre vítores y gritos de apoyo. Y es que el público congregado en la catedral ha mostrado en todo momento apoyo a todos los royals que iban llegando. Tras saludar a su primo, los Reyes accedían al edificio, ocupando sus puestos en primera fila, colocados enfrente de la familia directa y delante de los primos Urdangarin y Marichalar, a quienes doña Letizia ha saludado con la mano.
Para la ocasión, la Reina ha confiado en el equipo de modistas que tiene en Zarzuela para que le hicieran un vestido abrigo idéntico al verde que llevó en el servicio de acción de gracias en honor al duque de Edimburgo, en abril del año pasado. Es el mismo modelo, con escote cruzado, falda de vuelo y detalles de terciopelo en cintura y puños. Solo cambia el color, en esta ocasión negro, para cumplir con el luto. Lo ha combinado con medias negras, salones de Prada y un bolso negro de Armani que últimamente lleva en muchas ocasiones.
En cuanto a su elección de joyas, la Reina ha apostado por un broche histórico relacionado con las reinas españolas. Una pieza del lote de pasar que aparece descrita en el testamento de Victoria Eugenia como "un broche con perla grande gris pálido rodeada de brillantes y del cual cuelga una perla en forma de pera". Perteneció a la infanta Isabel y Victoria Eugenia lo lució en numerosas ocasiones, algunas tan importantes como la cena previa a la boda de don Juan Carlos y doña Sofía en Atenas. También ha sido uno de los favoritos de la reina Sofía y ahora parece que lo es de su nuera.
Doña Letizia lo lució por primera vez en la Pascua Militar de 2019 y lo repetía en 2021 en la cena de gala con motivo de la visita de Estado de Italia. Lo eligió también para arrancar la agenda institucional de este 2022, luciéndolo en un vestido azul marino y protagonizando con él una pequeña anécdota, ya que durante el desfile militar en el Patio de Armas del Palacio Real, a la Reina se le cayó el broche, dándose cuenta Felipe VI, quien estaba a su lado. Fue él, de hecho, el que se agachó para recogerlo y se lo entregó a su esposa, que lo guardó en la mano. Ya dentro de palacio, para la recepción, volvía a colgar de su vestido como si nada hubiera sucedido.
Llevaba, además, unos pendientes de diamantes y oro blanco en forma de lágrima, los mismos que el pasado octubre le prestó a Leonor para las audiencias de los Premios Princesa de Asturias.
La realeza mundial se ha reunido este lunes en Atenas para dar el último adiós al rey Constantino. A pesar de no ser ya una monarquía en el trono, los griegos mantienen lazos de sangre, y de amistad, con la mayoría de casas reales existentes, de ahí que el funeral del hermano de doña Sofía se haya convertido en un lugar de encuentro de todos ellos. Los Borbón Grecia han hecho casi pleno para despedir a su querido tío Tino, faltando únicamente la princesa Leonor y la infanta Sofía, quienes no han viajado hasta la capital.