Pablo y Marie-Chantal, reyes sin corona: buscan casa para mudarse a Grecia

Reyes sin corona, Pablo de Grecia y Marie-Chantal han decidido mudarse al país heleno tras la muerte del patriarca, el rey Constantino II, al que despedían este lunes en un funeral con representación de todas las casas reales europeas. De este modo, Pablo se presentará al mundo como el cabeza de la familia real griega. Es al menos lo que han publicado los medios del país: Pablo, a quien tantos llaman su alteza real, desea trasladar su residencia de forma permanente a Grecia. Y lo hará a lo largo de 2023.

Pablo de Grecia y su familia viven en Nueva York desde hace años. En la ciudad estadounidense tienen ambos sus profesiones, en especial la princesa Marie-Chantal, quien ha desarrollado su carrera en varios sectores, como la moda, la decoración y la literatura. El heredero de Constantino, por su parte, trabaja en el sector de las finanzas, por lo que ha de viajar con mucha frecuencia a Londres, ciudad en la que tiene también raíces, puesto que fue el hogar de sus padres durante muchos años de exilio.

Ha sido el periodista Giorgos Liagas quien ha informado de la intención de la nueva familia real griega de mudarse al país natal del rey Constantino. Liagas lo desveló en un programa de televisión y desde ese momento los periódicos helenos han dado por buena la historia. Este periodista ha informado además de que Pablo de Grecia ya está en proceso de encontrar una residencia acorde a sus necesidades. Se instalan en Atenas en los próximos meses, tan pronto como encuentren la vivienda ideal. Lo que no queda claro es si los cinco hijos del matrimonio se mudarán con ellos a Grecia, puesto que todos tienen sus vidas en Estados Unidos, donde estudian y trabajan.

El rey Constantino instaló su residencia permanente en Grecia en 2012, después de 46 años de exilio. Reinó pocos años y perdió la Corona cuando decidió apoyar un golpe militar en su país, un fracaso por el que tuvo que marcharse. Constantino y Ana María lograron volver en 2012, ya no como reyes, y el año pasado se mudaron a Atenas, precisamente por los problemas de salud del rey Constantino, para tener cerca médicos y hospitales que no tenían tan a mano en su residencia de Porto Heli, donde vivían hasta entonces.

Hasta ahora, el único hijo de Constantino y Ana María que vivía en la república griega era Nicolás, quien decidió establecerse allí hace unos años junto a su mujer, Tatiana Blatnik. Alexia, la mayor, vive en Canarias, mientras que Teodora, la pequeña, lo hace en Los Ángeles, donde intenta abrirse un hueco en el mundo del cine. Philippos viajaba a menudo al país heleno para pasar tiempo con sus padres, pero, como su hermano mayor, también tiene su residencia en Nueva York, aunque nunca ha descartado volver a instalarse en el país que vio nacer tanto al rey Constantino como a la reina Sofía y la princesa Irene, y donde los tres pasaron una infancia feliz junto a sus padres.

Precisamente, este lunes veíamos cómo el heredero de la Casa Real griega ya ejercía de jefe durante el funeral de su padre. Fue el encargado de recibir a los jefes de Estado que acudieron al último adiós al antiguo monarca, como el propio rey Felipe junto a la reina Letizia, Felipe de los belgas y Matilde o Guillermo de Holanda con su esposa, Máxima. También fue el responsable de pronunciar un emotivo discurso durante la ceremonia que tuvo lugar en la catedral Metropolitana de Atenas. Un momento en el que no pudo evitar romperse frente al féretro de su padre.

También el protocolo que se siguió este lunes durante el funeral y posterior entierro tuvo a Pablo de Grecia como cabeza de la Casa Real helena. Además de que fue, junto a sus hermanos varones, quien recibió el pésame de los ciudadanos, su esposa fue la última en llegar a la ceremonia, como esposa del nuevo rey y respaldando a la viuda, la reina Ana María. Eso sí, la norteamericana quiso permanecer en un segundo plano y dejar a su marido y su suegra solos en la puerta de la catedral, recibiendo el enorme cariño que les mostraron los ciudadanos atenienses. Un gesto que quizá ha influido en la decisión del matrimonio de instalarse en el país, que ya dan por buena todos los medios griegos.