La reina Sofía retoma la agenda, pero continúa de luto por la muerte de su hermano

La Reina emérita ha dejado Atenas para regresar a sus actos oficiales en nuestro país, donde este lunes retomaba su agenda tras el fallecimiento de su hermano, Constantino de Grecia, el pasado 10 de enero.

Eso sí, en su primer acto, doña Sofía ha acudido de luto, vistiendo de negro en honor al que fuera su hermano pequeño y al que estaba tan unida. Lo ha hecho con un traje de chaqueta y pantalón de ese tono a juego con una blusa, también de color negro. Bolso de hombro y zapatos de tacón de bloque también a juego. Un riguroso luto que no ha querido romper en este primer acto en el que la hemos podido ver, eso sí, sonriente, tanto a su llegada como en la entrega de premios que ha presidido.

* Si no ves correctamente este formulario, haz clic aquí

La entrega de los premios de investigación de la Fundación Renal Íñigo Álvarez de Toledo ha sido el primer acto en el que hemos podido ver a la madre de Felipe VI tras un largo mes pendiente de la salud de su hermano, que la llevó a viajar directamente desde Roma, donde se encontraba para acudir al funeral de Benedicto XVI, hasta Atenas.

Allí se reunía con su familia en los últimos momentos de vida de su único hermano varón y podía seguir de cerca junto a su cuñada y sus sobrinos, además de su hermana Irene, la última hora del estado de su hermano, que finalmente fallecía a los 83 años el 10 de enero.

Logró reunir la Reina emérita a prácticamente todos sus familiares, exceptuando la Princesa de Asturias y la infanta Sofía, en un momento agridulce para ella. Un alto en su agenda en el que tenía que decir adiós a su querido hermano en una despedida a la que, aun no siendo de Estado, sí acudieron muchos representantes de las casas reales europeas con las que estaba emparentado el último rey heleno.

En este acto hemos podido ver a doña Sofía en la sede del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de Madrid, donde le han agradecido públicamente su compromiso con la prevención, especialmente con la prevención de la enfermedad renal. Una causa que, le han reconocido, es digna de admiración de todos los españoles. Todo el público presente en el acto ha ofrecido un cálido aplauso a la emérita por su apoyo y ella lo ha agradecido emocionada extendiendo sus manos y sonriendo ampliamente.

En esta edición de estos premios a la investigación básica, clínica y en enfermería nefrológica y humanización se ha premiado a los ganadores de las tres últimas ediciones, desde 2020 hasta 2022, debido a la pandemia. Además, doña Sofía no solo ha sido la encargada de ir otorgando los diferentes galardones a los premiados, algo que ha hecho sonriente a pesar de su riguroso luto.

También ha presidido el acto de presentación de ‘Renata mi nefróloga’, un libro ilustrado que está dirigido a niños, para fomentar la prevención de la enfermedad renal ya desde la infancia. De hecho, en el acto ha saludado con mucho cariño a algunas niñas que han participado en la creación de este libro.

La Fundación Renal es una entidad sin ánimo de lucro que lleva más de cuarenta años dedicada a la atención integral de las personas con enfermedad renal. En los 18 centros de diálisis que tiene en las comunidades autónomas de Galicia, Castilla y León y Madrid, les ofrece, además de un tratamiento clínico de la mejor calidad, apoyo psicológico y social, programas de ejercicio y asesoramiento nutricional.

La fundación cuenta además con un centro especial de empleo, la lavandería Agua y Jabón, para fomentar la inserción laboral de los enfermos renales, con un piso de acogida para pacientes con escasos recursos y con un fondo de ayuda social destinado a cubrir las necesidades básicas de aquellos que lo necesiten.

Doña Sofía abandonaba Atenas días después de que lo hicieran sus hijas, las infantas Elena y Cristina, además de sus nietos o su hijo, el Rey, acompañado de la Reina. Se quedó la Reina emérita en compañía de su cuñada, Ana María de Grecia, y de su hermana Irene, después de que incluso el rey Juan Carlos abandonara la capital helena después de haberle dado el último adiós al que fuera su cuñado y al que tan unido estuvo.