Exclusiva | Ucrania y un apodo de ciencia ficción: el proceso de selección de la infanta Sofía en el internado de Gales

Es oficial. Tras semanas de especulaciones, la Casa Real aclaraba este lunes el futuro académico de la infanta Sofía. La benjamina de don Felipe y doña Letizia seguirá los pasos de su hermana mayor y estudiará Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College. El próximo mes de agosto, la joven hará las maletas y pondrá rumbo a Gales para cogerle el testigo a la princesa Leonor, quien en mayo pone fin a su aventura en Reino Unido. Aunque ha sido ahora cuando el Palacio de la Zarzuela ha dado a conocer la información, la infanta Sofía lleva ya meses con la decisión tomada de irse al extranjero.

Antes de ser aceptada, y como el resto de alumnos, la pequeña del clan Borbón Ortiz ha tenido que pasar por un duro proceso de selección del que Vanitatis tiene todos los detalles. Fueron alrededor de 3.000 los jóvenes de toda España que iniciaron el proceso con la intención de poder cursar el Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College, aunque de ellos solo veinte, diez becados y otros diez -como la infanta Sofía- sin beca, son los elegidos que podrán recibir clases en el mítico castillo de St. Donat's, bautizado por la prensa británica como el "Hogwarts hippy".

Según ha podido confirmar Vanitatis, la fase inicial fue online, y de esos 3.000 que probaron suerte solo quedaron 40, entre ellos la hija de los Reyes. Los elegidos se enfrentaron a las pruebas presenciales, las más complicadas, la pasada semana en Madrid. El UWC Atlantic College es un centro exclusivo, que no elitista, y para que el proceso fuera más justo se hizo que los candidatos realizaran las pruebas bajo un apodo. En el caso de Sofía fue Dune, en referencia al famoso libro, luego llevado a la gran pantalla en dos ocasiones, la última en 2021. Ya conocíamos que la Infanta es una fan de la ciencia ficción, y en especial de la saga de Star Wars, como su padre, y esta elección no viene más que a reafirmarlo.

Como decíamos, las pruebas se celebraron durante varios días en Madrid, la pasada semana, y a ellas acudió la infanta Sofía, únicamente acompañada por un escolta de la Casa Real. Testigos presenciales cuentan que a la joven se la vio muy nerviosa en todo momento, consciente de lo decisivo de este proceso para su futuro académico. Las pruebas incluyeron un juego de rol o dinámicas grupales; siempre con el trasfondo de algún tema de actualidad y de suma importancia, como la guerra de Ucrania o el ecologismo.

Tras ello llegó la entrevista personal. Uno a uno, los candidatos se sentaron frente a un jurado cualificado para hablar sobre ellos mismos. Se les pidió que dieran una visión personal sobre dos responsabilidades propias, dos ideas que nadie consiguiera cambiar en su pensamiento y dos grandes errores que hubieran podido cometer. Una vez terminadas las entrevistas, se decidió el nombre de los veinte elegidos y se les comunicó posteriormente la noticia. En el caso de la infanta Sofía fue positiva, siendo apta para estudiar en el UWC Atlantic College.

"Perfiles distintos a nivel social"

Aunque el proceso de selección se va actualizando cada año, no dista mucha del que superó hace décadas Marina Conde, diseñadora y creadora de la firma La Condesa, quien contaba a Vanitatis su propia experiencia en el UWC Atlantic College. "El proceso de selección lo llevan distintas fundaciones en cada país. Es un proceso muy duro y exigente. El primer filtro son las notas. Tienes que mandar tu expediente académico y lo tienen muy en cuenta. Una vez pasas ese filtro, hay una solicitud estándar en la que te hacen varias preguntas que tú tienes que desarrollar como ensayos, al estilo anglosajón", explicaba.

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"Ellos te preguntan cosas tipo: ¿cómo ves el mundo?, ¿qué problemas sociales son los que más te preocupan?, ¿qué haces para resolverlos?, ¿estás implicado para que el mundo sea un lugar mejor? Cosas fuera de lo común, buscan perfiles distintos a nivel social. No sirve para nada que seas el típico alumno con notas excelentes si luego solo te limitas a ir al instituto y no tienes nada más, porque no es un sitio al que vas para que sea un puente a las universidades americanas. Quieren que sea verdaderamente un lugar de entendimiento, de convivencia de culturas", continuaba Marina Conde.

Sobre las pruebas presenciales, detallaba: "En mi época pasabas un fin de semana haciendo pruebas tremendas, entrevistas personales con adultos muy preparados, con especialistas en literatura, con gente que, con tu solicitud delante, te empiezan a preguntar sobre ti, te ponen un poco a prueba porque quieren estar seguros de que vas a estar bien allí, de que lo vas a aprovechar, que de repente no te va a dar morriña y te vas a echar para atrás".

Marina Conde pudo estudiar en el internado galés gracias a una beca. En el caso que nos ocupa, y como se deja claro en el comunicado mandado por Casa Real, "el coste del Bachillerato Internacional que cursará la infanta Sofía será igualmente satisfecho en su integridad personalmente por Sus Majestades los Reyes con su asignación anual y asciende a la cantidad de 74.000 libras esterlinas por los dos cursos". También que "el Rey ya ha comunicado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "este nuevo periodo de la educación de la infanta Sofía".