Es noticia
Menú
El origen de la mala relación entre Meghan Markle y Sophie, la duquesa de Edimburgo
  1. Casas Reales
Casa Real Británica

El origen de la mala relación entre Meghan Markle y Sophie, la duquesa de Edimburgo

Una relación que ha tenido altibajos, en los que Sophie siempre ha tratado de ejercer un papel de mediadora, que le fascinaba a la reina Isabel II

Foto: Las dos mujeres, en el funeral de Isabel II. (Reuters/Pool/Hannah McKay)
Las dos mujeres, en el funeral de Isabel II. (Reuters/Pool/Hannah McKay)

Mucho se ha especulado sobre la relación entre Meghan Markle y la nueva duquesa de Edimburgo, Sophie. Estos días, tras el nombramiento de los nuevos títulos de Eduardo en la prensa británica se hacían eco de las declaraciones de algunos amigos íntimos de la mujer del príncipe Eduardo en las que aseguraban que la nueva duquesa se siente “aliviada” de no tener que hacerle una reverencia a la esposa de Harry. Una información un tanto extraña teniendo en cuenta que solo los reyes reciben reverencias de otros royals. No es común el plongeón entre Altezas Reales, tratamiento que tienen -y tenía Sophie ya como condesa- ambas.

Sin embargo, esta noticia podría llevar a pensar que la relación entre ambas es muy mala, pero no es exactamente así, sino que ha pasado por diferentes altibajos a lo largo de los años. Sin duda, Sophie siempre se ha mostrado muy amable con Meghan Markle e incluso la nuera favorita de la reina Isabel II la invitó a un té en Bagshot, su residencia oficial, Ahí se dio cuenta de que nunca serían amigas íntimas, a pesar de que, curiosamente, tienen bastantes elementos en común.

placeholder Las dos duquesas, en el cortejo fúnebre del funeral de Isabel II. (EFE/Guy Bell)
Las dos duquesas, en el cortejo fúnebre del funeral de Isabel II. (EFE/Guy Bell)

“Se llevaban perfectamente bien, pero Sophie sintió que nunca se convertirían en las mejores amigas”, explicaban fuentes cercanas a la entonces condesa de Wessex. La razón era, según estas mismas fuentes, la visión poco convencional de Meghan sobre la familia real. “Digamos que Meghan parecía tener su propia agenda”, llegaron a decir.

Según el libro ‘Elizabeht: un retrato íntimo’, de Gyles Brandreth, la reina Isabel esperaba que Sophie ejerciera de mentora de Meghan a su llegada a la familia real británica, puesto que, según creía la soberana, las experiencias de la duquesa de Edimburgo con los medios británicos podrían haber ayudado a la duquesa de Sussex.

En un extracto de este libro, la reina le aconsejó a Meghan que “Sophie puede ayudarte a mostrar las cuerdas” debido a que Isabel enseguida entendió que la prometida de Harry podría sentir que adaptarse a la vida en la realeza era “un desafío al principio”.

placeholder La relación entre ambas duquesas ha tenido altibajos. (Reuters/Pool/Hannah McKay)
La relación entre ambas duquesas ha tenido altibajos. (Reuters/Pool/Hannah McKay)

Un consejo que Meghan Markle no siguió, ya que no pareció estar interesada en crear una relación más estrecha con Sophie. Como escribe Brandreth en su libro, “Meghan dejó claro que no sentía que necesitara la ayuda de Sophie. Tenía a Harry”. Una reacción de la exactriz norteamericana que preocupó a la entonces soberana, quien estaba interesada en que su transición a la Casa Real británica fuera de la mejor manera posible.

Isabel II atribuyó este desaire de Meghan hacia Sophie a los nervios previos a la boda, pero aunque nunca llegaron a fomentar una relación en la que la duquesa de Edimburgo orientara a Meghan, lo cierto es que entre ambas se mantuvo una relación cordial.

* Si no ves correctamente este formulario, haz clic aquí

De hecho, tras ser una de las primeras en invitarla tras su boda en 2018 con Harry a tomar el té a solas, también fue la primera en acudir a conocer a Archie un año después en Frogmore Cottage. Entonces Meghan fue duramente criticada por no posar con el recién nacido en los escalones del Hospital de Portland y Sophie se mostró como una persona común de lo más “empática” en comparación con otros miembros de la familia real británica.

Sophie entiende las presiones mediáticas a las que se ha tenido que enfrentar la duquesa de Sussex porque ella misma las sufrió en sus propias carnes. Como confesó en una entrevista a ‘The Times’ le llevó un tiempo adaptarse a que sus suegros fueran de la familia real. Además, la prensa al principio también la siguió a todas partes, en su vivienda, hasta cuando compraba su almuerzo.

Sophie era la nuera favorita de la reina Isabel II, tenían una relación de lo más especial, y la soberana sabía del talante mediador y conciliador de la esposa de su hijo pequeño. Meghan no buscaba consejos, aunque eso no impidió que la duquesa de Edimburgo se mostrara cercana a la duquesa de Sussex en ocasiones.

Foto: Las cuñadas durante el último Trooping The Colour. (Getty)

De hecho, pudimos verlas compartir coche en el funeral de la fallecida Isabel II el pasado mes de septiembre. Si bien es cierto que si leemos la comunicación verbal entre ambas, no parecen ser las mejores amigas. También es cierto que, con Sophie, Meghan no se siente tan tensa como con sus cuñados, los príncipes de Gales. Por lo que, dadas las circunstancias de cómo estaban las cosas entre los Sussex y la familia real tras el Megxit, Sophie consiguió ejercer ese papel conciliador y coexistir en paz con la mujer de Harry.

Sophie, al igual que Meghan, tenía una carrera profesional antes de formar parte de la realeza a la que tuvo que renunciar por incompatibilidad. Además, en la agenda de la duquesa de Edimburgo también se encuentra el papel de la mujer y cómo empoderarla. No en vano Sophie apoya el trabajo de educación de las niñas o la erradicación de la violencia contras las mujeres en África. De sobra es conocido el papel que tiene en la agenda de Meghan el apoyo a las mujeres e incluso ha sido defensora de la participación política y el liderazgo de ONU Mujeres.

Mucho se ha especulado sobre la relación entre Meghan Markle y la nueva duquesa de Edimburgo, Sophie. Estos días, tras el nombramiento de los nuevos títulos de Eduardo en la prensa británica se hacían eco de las declaraciones de algunos amigos íntimos de la mujer del príncipe Eduardo en las que aseguraban que la nueva duquesa se siente “aliviada” de no tener que hacerle una reverencia a la esposa de Harry. Una información un tanto extraña teniendo en cuenta que solo los reyes reciben reverencias de otros royals. No es común el plongeón entre Altezas Reales, tratamiento que tienen -y tenía Sophie ya como condesa- ambas.

Casa Real
El redactor recomienda