La gestación subrogada llega al mundo royal: Gustav Sayn Wittgenstein será padre por vientre de alquiler

Con el debate sobre la gestación subrogada de plena actualidad todavía en España, tras el nacimiento en Miami de la nieta de Ana Obregón y después de que la actriz confirmara que la niña fruto del vientre de alquiler era, en realidad, hija de Aless Lequio, otro caso similar acaba de llamarnos mucho la atención, aunque el entorno sea radicalmente diferente. Acabamos de conocer la noticia de que el príncipe Gustav Sayn Wittgenstein Berleburg, sobrino de la reina Margarita de Dinamarca, y su esposa, Carina Axelsson, van a ser padres este verano de su primer hijo, al que dará a luz una tercera persona.

Los príncipes han comunicado que ampliarán de esta inesperada manera su familia después de pasar por el altar el año pasado. Tanto el danés como la norteamericana no son ajenos a la controversia, ya que su relación sentimental, digna del guion de una película, llegó a calificarse como de 'prohibida' en los círculos royal.

Pese a que su historia de amor se remonta a hace más de dos décadas, fue en torno a 2011 cuando empezó a generarse interés sobre quién era la misteriosa joven californiana que residía junto al príncipe Gustav en el castillo alemán de Berleburg. Carina Axelsson nació y creció en Los Gatos, un lugar conocido por su estilo de vida alternativa, pero por los azares de la vida terminó yéndose a vivir a Europa. Desde París terminaría en Alemania, donde durante una cena conocería a su futuro esposo.

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Según relató el príncipe Gustav en una curiosa entrevista con 'Billed Bladet', "había aceptado una invitación a cenar de unos amigos en Alemania. Un par de amigos, uno conocía a Carina y otro me conocía a mí. Era una trampa. Había quedado con Carina y en ese momento sonó su teléfono móvil. Todos los móviles siguieron sonando durante toda la cena. Cuando terminó la cena, Carina volvió a encender el teléfono. Cogí su número y la llamé desde otra parte de la sala y empezó el amor".

En junio de 2006, hizo su primera aparición oficial con la familia Sayn Wittgenstein Berleburg en la boda principesca de Felipe de Hesse y Laetitia Bechtolf en Alemania. A partir de entonces, Axelsson se instaló en Schloss Berleburg, encargándose de la restauración del castillo, algo que, según asegura el mencionado medio danés, no gustó a su familia política. Por aquel entonces los habitantes de Berleburg empezaron a referirse a ella como Frau Axelsson: la dama del palacio.

Pasados los años y con la relación afianzada, la gente comenzó a preguntarse por qué no se casaban estos dos tortolitos. No era por miedo al compromiso, ni mucho menos. La razón se remontaba a Gustav Albrecht, el abuelo del novio, que fue un alto general del ejército alemán y mantenía una estrecha relación con el nazismo. Tanto es así que antes de morir dejó estipulado en su testamento que ninguno de sus herederos podría casarse con una mujer que no fuera noble y de raza aria so pena de perder su título, la jefatura de la casa Sayn Wittgenstein Berleburg y el castillo de marras.

Decidido a acabar con esa ley obsoleta, tras años de batallas judiciales, en 2020 el Tribunal de Apelación de Renania del Norte-Westfalia le daba la razón a Gustav y lo confirmaba como heredero absoluto y, además, rescindía el testamento de su abuelo. Por fin, el 5 de junio de 2022 se producía el enlace matrimonial que parecía no iba a llegar nunca. Federico y Mary de Dinamarca fueron los padrinos de una boda de cuento de hadas en la que también estuvieron presentes Victoria de Suecia y el príncipe Daniel. De este modo, el hijo de la princesa Benedicta de Dinamarca y la modelo reconvertida en escritora se dieron el 'sí, quiero'. Ahora, con el anuncio de su próxima paternidad, comienzan un nuevo capítulo en sus vidas.