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La marquesa de Lansdowne, mano derecha de la reina Camila en la coronación (y no, no es su hermana)
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Amigas y confidentes

La marquesa de Lansdowne, mano derecha de la reina Camila en la coronación (y no, no es su hermana)

Esta decoradora fue su sombra en Westminster y posó con la familia real en el balcón de Buckingham. Amigas desde hace 50 años, califica a la reina como "dura y ferozmente fiel"

Foto: Los reyes Carlos III y Camila, en el balcón de Buckingham. (Reuters/Hannah McKay)
Los reyes Carlos III y Camila, en el balcón de Buckingham. (Reuters/Hannah McKay)

En ceremonias de tanto boato y solemnidad como la coronación de Carlos III y la reina Camila, la presencia de los niños ayuda a aligerar la tensión del momento. Han quedado retratadas para la Historia la entrada sublime del monarca con los líderes espirituales del Reino Unido, y antes la de la reina con sus pajes de honor… Sin embargo, en esa estampa aparecían dos mujeres vestidas idénticas de blanco marfil, pendientes de Camila y que se colocaron detrás de ella mientras era coronada.

Hablamos de la presencia en la abadía de Westminster de la marquesa de Lansdowne, que levantó su túnica ceremonial, y de Annabel Elliot, su hermana, que enderezó el vestido Bruce Oldfield de Camila. Después, las vimos con la familia real británica y los pajes en el balcón del palacio de Buckingham.

placeholder Camila, una reina con corona, acompañada de la marquesa de Lansdowne. (Getty)
Camila, una reina con corona, acompañada de la marquesa de Lansdowne. (Getty)

Con esta decisión, la reina Camila ha premiado la fidelidad de su ‘otra’ hermana, lady Lansdowne. Esta ha relatado al ‘Daily Telegraph’ cómo vivió este momento histórico: “Supimos que salíamos al balcón de Buckingham un minuto antes. Fue un pequeño regalo para nosotras y los niños”. Aunque saca a relucir su sentido del deber: “Creo que se dieron cuenta de lo difícil que era que los ropajes de los reyes se deslizaran por las alfombras sin ayuda. Luego nos dijeron que todos íbamos a salir, y fue algo extraordinario”.

Tanto ella como Annabel Elliot, que lucían vestidos de Fiona Clare, fueron designadas acompañantes de la reina en noviembre pasado, reemplazando el papel tradicional de damas de honor. La marquesa de Lansdowne, de 68 años, esposa de Charles Maurice Petty-Fitzmaurice, es diseñadora de interiores. De nombre Fiona Shelburne, es amiga íntima de la reina desde el primer matrimonio de Camila con Andrew Parker Bowles.

placeholder Saludo de Carlos III y la reina Camila desde el balcón de Buckingham. (Reuters/Hannah McKay)
Saludo de Carlos III y la reina Camila desde el balcón de Buckingham. (Reuters/Hannah McKay)

Fue su confidente cuando su amiga recibió fuertes críticas por su intromisión en el matrimonio de Carlos con Lady Di, y después con el reconocimiento de Isabel II; también conoce la historia de amor entre los actuales reyes de medio siglo. Recientemente, aportó su opinión a un perfil sobre la reina publicado en ‘Sunday Times’. Califica de “duro” lo que Camila vivió en los años 90: “Estaba sola, sin ninguna protección. Ahí era donde podíamos ayudarla: venía y se quedaba con nosotros”.

Habla orgullosa de ella: “Es una mujer dura, criada con ese extraordinario sentido del deber en el que sigues adelante, y no te quejas. A veces era horrible, pero su sentido del humor y saber que tenía a sus amigas la ayudó a superarlo”. Sobre las acusaciones del príncipe Harry, que acusó a su madrastra de filtrar información a la prensa y la calificó de “villana”, lady Lansdowne asegura que Camila “estuvo dolida, pero no deja que nada la afecte”. Nunca pensó ser reina y ha demostrado una vez más que “es ferozmente fiel a sus amigos”.

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Fiona Shelburne ha sido su apoyo incondicional con Annabel Elliot, la hermana de sangre de Camila, año y medio más joven que ella y decoradora de las numerosas propiedades inmobiliarias de Carlos durante años, detalle que no pasó desapercibido para la prensa británica.

En ceremonias de tanto boato y solemnidad como la coronación de Carlos III y la reina Camila, la presencia de los niños ayuda a aligerar la tensión del momento. Han quedado retratadas para la Historia la entrada sublime del monarca con los líderes espirituales del Reino Unido, y antes la de la reina con sus pajes de honor… Sin embargo, en esa estampa aparecían dos mujeres vestidas idénticas de blanco marfil, pendientes de Camila y que se colocaron detrás de ella mientras era coronada.

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