"Benvingut, Pablo Urdangarin": el Granollers comparte la primera fotografía del sobrino del Rey con la equipación

Aunque el recuerdo parezca ya lejano, hubo un tiempo, antes de su boda con la infanta Cristina y antes de su entrada en prisión, en el que Iñaki Urdangarin tan solo aparecía en los titulares por sus destacadas actuaciones como jugador de balonmano defendiendo los colores del Barça y de la selección española. Una época dorada que el guipuzcoano recordaba hace tan solo unos días en una cena junto a sus antiguos compañeros de equipo, con los que consiguiera nada menos que cinco Copas de Europa.

Ahora es uno de sus hijos, Pablo Nicolás Sebastián Urdangarin y Borbón, el que se encamina paso a paso a la difícil tarea de reeditar sus éxitos. Aunque para ello haya tenido que abandonar, quién sabe si tan solo de manera momentánea, el club de los amores de su progenitor.

En un nuevo capítulo de una trayectoria deportiva que ya le ha llevado a militar en las ligas alemana y francesa, el sobrino de Felipe VI acaba de ser presentado como nuevo jugador del Fraikin BM Granollers. El joven, que esta temporada ha alternado partidos con el primer equipo del Fútbol Club Barcelona y su filial, ha firmado por dos temporadas y lucirá el mismo número que llevaba hasta ahora, el 77, como ya avanzó Vanitatis.

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El extremo de 22 años, que ha logrado buenos números con la camiseta azulgrana, anotando 53 goles en los 29 partidos que ha disputado en la máxima categoría, llega a un sólido conjunto catalán que ha cuajado una gran actuación esta última temporada, consiguiendo la tercera plaza en la liga Asobal, aunque a mucha distancia del todopoderoso Barça, que no ha dado opción a sus rivales este año.

Pablo Urdangarin, que se despedía hace unos días de forma apoteósica entre autógrafos y selfies de sus antiguos compañeros, tendrá ahora por tanto la oportunidad de jugar en Europa en un equipo que aspira a todo. También disfrutará de un inmejorable escaparate para brillar y quizá recibir pronto la llamada de la selección española, con la que su padre jugó hasta en 154 ocasiones.

Eso sí, las cifras que se manejan como su sueldo en esta nueva etapa no llegan ni mucho menos a las que ganan los futbolistas de primera división. Según publica 'La Vanguardia', en el Granollers tendrá unos modestos ingresos anuales de entre 20.000 y 25.000 euros. Suficiente para costearse los gastos del piso en el que vive con otros dos compañeros sin tener que depender del dinero de sus padres.

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Detrás de la meditada decisión de Pablo Urdangarin de abandonar las filas del 'club familiar', pero solo para irse a unos pocos kilómetros de Barcelona, se encuentra también su cada vez más afianzada relación con Johanna Zott. Precisamente la alemana se ha convertido en su hincha más fiel y ya la hemos visto en más de una ocasión animarle desde la grada en sus partidos.

También deportista como él, en su caso jugadora de voleibol, los dos jóvenes pasan muchas horas en la casa familiar de ella, que vive en una zona noble a las afueras de Barcelona, en un chalé con jardín y piscina. Pero también se han dejado ver muy cómplices en eventos públicos, como en la última edición del torneo de tenis Conde de Godó celebrado en la Ciudad Condal. Allí se les pudo ver haciéndose fotos entre risas y sin miedo a ojos indiscretos.

Lejos queda ya el malestar del joven cuando se publicaron las primeras fotos y los datos personales de su chica y existía el temor en su entorno de que empezaran a seguirla como si fuera una celebrity. Ahora su noviazgo es sólido y, según ha podido saber Vanitatis, Pablo ha 'adoptado' incluso a la familia de su pareja como propia.