Así será el verano real: Felipe VI en Mallorca y don Juan Carlos en Sanxenxo con sus regatas
Según ha podido confirmar Vanitatis mediante fuentes solventes, el Rey emérito visitará nuestro país este próximo verano con motivo de las regatas de Sanxenxo
Desde que don Juan Carlos se instaló en Abu Dabi, sus regresos a España siempre han sido motivo de polémica. La primera vez fue en mayo del 2022, donde el destino era muy claro: Sanxenxo. La segunda en mayo de este año en la misma localidad gallega. En esta ciudad vive su amigo y anfitrión, Pedro Campos, que forma parte del grupo que comparte regatas con el Rey emérito. Este entorno está formado por empresarios con alto poder adquisitivo que no necesitan de la influencia real, como Juan Carlos Escotet, Mauricio Sánchez-Bella o Tara Getty. Todos ellos reconocidos por mantener un perfil público muy bajo y pasar desapercibidos. No obstante, algunos han viajado varias veces hasta los Emiratos para acompañar al ex jefe del Estado.
Dentro de unas semanas, volverán a recibir al monarca jubilado que, tal y como ha podido confirmar Vanitatis, pasará parte del verano en Galicia. Según avanzaba Marina Pina en 'ABC', su próximo viaje sera para participar en la regata de la Copa de España, que acontecerá los días 28, 29 y 30 de julio. Si por alguna razón no puede embarcar para competir, lo hará en una lancha desde la que seguirá la regata. Así lo hizo la última vez. Su participación dependerá de cómo se encuentre de movilidad.
Desde el entorno gallego no aseguran definitivamente esa estancia en Sanxenxo, pero sí nos dan unas claves que sirven para darla casi por hecho. "No podemos negar que no viene", responden a nuestro digital. Esta frase da lugar a interpretaciones, pero lo que sí es seguro es que don Juan Carlos no tiene intención de pasar julio y agosto en Abu Dabi, donde salir a cualquier lugar en el que no haya aire acondicionado es un peligro para la salud.
Si regatea o no es ya otra historia, pero lo que no habrá será el desplazamiento multitudinario de prensa, como en otras ocasiones. De esta manera, al igual que en el pasado, se volverán a suceder titulares, debates en radio y televisión cada día. Sin embargo, la actitud del emérito ha cambiado. En su última visita no salió de la casa de Pedro Campos y se marchó como llegó, sin hacer ruido. Esta vez no hubo mensaje por parte de Felipe VI, ya que había cumplido con la consigna de ser discreto.
Si finalmente don Juan Carlos aparece en esas fechas en Sanxenxo, coincidirá en tiempo, que no en espacio, con otra regata a muchos kilómetros de distancia en la que participará su hijo. Se trata de la Copa del Rey Mapfre, que se celebra en la bahía de Palma. Las fechas de esta competición están cerradas desde mayo de este año. Comenzará el 29 de julio y finalizará el sábado 5 de agosto. Esa tarde, don Felipe entregará la copa al equipo ganador y también se encargará de repartir el resto de trofeos menores a los participantes, porque, como ya se ha podido confirmar, las elecciones no trastocarán las vacaciones de verano de la familia real española en Mallorca.
Por el momento, se desconoce si también participará en los entrenamientos como hizo en la edición pasada. Pero sí podemos decir que el jefe del Estado es uno de los tripulantes del Aifos (Sofía al revés), un modelo que se conoce como TP52, al que se le considera un Fórmula 1 en este tipo de navegación deportiva. No es de nueva construcción, sino que la Armada ha recuperado un velero que fue botado en 2005.
La presencia del rey Felipe en estas convocatorias marineras se convierte en un importante atractivo económico y deportivo para la isla. El Club Náutico es el centro de operaciones en esa semana de regatas. El monarca disfruta con el resto de los regatistas de su pasión por el mar. No solo con sus compañeros de barco, sino también con los socios. Es habitual que, una vez que finaliza la jornada marinera, cambie impresiones en el bar tomando una cerveza o un gin-tonic. Mantiene una rutina que no varía en lo esencial. Lo único que cambia es el tiempo que tarda en regresar a Son Vent con su familia.
Esta coincidencia de regatas favorece la estancia de don Juan Carlos en Sanxenxo, que tendrá menos visibilidad y, por lo tanto, un perfil más bajo. Aseguran a Vanitatis que este nuevo viaje a Sanxenxo es la prueba del algodón. No habrá polémica y por ello sus viajes a España van a ser más frecuentes.
Desde que don Juan Carlos se instaló en Abu Dabi, sus regresos a España siempre han sido motivo de polémica. La primera vez fue en mayo del 2022, donde el destino era muy claro: Sanxenxo. La segunda en mayo de este año en la misma localidad gallega. En esta ciudad vive su amigo y anfitrión, Pedro Campos, que forma parte del grupo que comparte regatas con el Rey emérito. Este entorno está formado por empresarios con alto poder adquisitivo que no necesitan de la influencia real, como Juan Carlos Escotet, Mauricio Sánchez-Bella o Tara Getty. Todos ellos reconocidos por mantener un perfil público muy bajo y pasar desapercibidos. No obstante, algunos han viajado varias veces hasta los Emiratos para acompañar al ex jefe del Estado.
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