Los fotos más tiernas de los reyes de Bután con sus hijos en un lugar de grandes recuerdos

Escondido entre montañas y a salvo del turismo masificado, Bután es considerado como uno de los países más felices del mundo y un reino donde el paso del tiempo es apenas perceptible, pero que cada vez es más conocido en todo el mundo gracias en gran medida al trabajo de sus reyes, Jigme Khesar Namgyel Wangchuck y Jetsun Pema. Reconocidos como unos soberanos modernos y cercanos, su arduo trabajo en materia de relaciones internacionales, prácticamente inexistentes antes de su llegada al trono hace doce años, ha contribuido a mejorar su imagen de cara al exterior.

A esta labor contribuye la distribución por parte del palacio real de Bután de imágenes de los actos oficiales del Rey Dragón y de su familia en eventos alejados del glamour de las cortes europeas, pero donde se puede apreciar su lado más personal. El más reciente ha tenido lugar cuando visitaban el colegio Lungtenzampa para celebrar su medio siglo de vida.

Los reyes aprovecharon la feliz ocasión para que sus dos hijos pequeños, los príncipes Jigme Namgyel y Jigme Ugyen, pudieran conocer de cerca la escuela de su infancia y juventud.

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Aferrados cada uno a los brazos de su madre, los dos principitos entraron tímidamente en el patio de la prestigiosa escuela secundaria de Lungtenzampa, situada en la capital butanesa. Timbu, la capital, alberga aproximadamente 100.000 habitantes, incluida la familia real, y es el principal centro de comercio, religión y gobierno del país. Vestidos con sus trajes tradicionales, Jigme Namgyel, de siete años, y su hermano menor, Jigme Ugyen, de tres, observaron atentamente a los hombres -monjes y profesores- que se acercaron a darles la bienvenida.

Fundada en 1973 como jardín de infancia bajo el auspicio de la princesa Dechen Wangmo, tía de Jigme Khesar, entonces ministro de Desarrollo, la escuela pública evolucionó a lo largo de los años para convertirse en una universidad. Fue el centro donde estudió del rey de Bután de 1988 a 1992, y al que luego acudiría su esposa unos años más tarde, de 2001 a 2005, según aseguraba en su cobertura del evento el canal de televisión Bhutan Broadcasting Service. Entre sus antiguas alumnas se encuentran también las princesas Sonam Dechan Wangchuck, Dechen Yangzom Wangchuck y Eeuhelma Choden Wangchuck, las hermanas del soberano.

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Los bailes y canciones tradicionales interpretadas por los estudiantes se sucedieron durante la celebración impregnada de nostalgia y de recuerdos de infancia que sin duda trajo buenos recuerdos a los reyes. Durante el acto, los invitados pudieron disfrutar de diversas actuaciones culturales y de una exposición científica de objetos construidos por estudiantes de secundaria.

"Los maestros y estudiantes de la escuela Lungtenzampa están muy agradecidos y bendecidos de tener a Su Majestad el Rey y a la familia real para estas festividades de hoy", dijo el director de la escuela, Dawa Tshering, a través de sus redes sociales. "Un placer también compartido por Jetsun Pema y su marido. Los soberanos también han preparado una pequeña sorpresa para conmemorar esta ocasión especial: la inauguración de una cancha de tenis llamada Golden Jubilee Tennis Court".

Las redes sociales de la escuela mencionaron también las palabras de otro antiguo alumno como el actual ministro de Salud de Bután, Dechen Wangmo: "Me uní a la escuela en 1985 y me gradué en 1991. Mi parte favorita era la biblioteca, leer y esperar la hora del té, que era cuando nos daban galletas. Creo que éramos la única escuela con una hora del té".

En un futuro próximo, Lungtenzampa tiene muchas papeletas para convertirse en la escuela de los príncipes Jigme Namgyel y Jigme Ugyen y también de su futuro hermano o hermana. A mediados del pasado mes de junio, se comunicaba de forma oficial que la reina estaba embarazada de nuevo.

"Los soberanos de Bután se complacen en compartir la noticia de que Su Majestad espera un tercer hijo, previsto para principios de otoño", aseguraba un breve texto que se completaba con el agradecimiento por "las oraciones y los buenos deseos" recibidos por los royals.