La criticada imagen de Guillermo y Kate Middleton junto al príncipe Andrés de la que todos hablan

Desconocemos si fue algo espontáneo o preparado, pero no cabe duda de que ha levantado ampollas. Nos referimos a las imágenes captadas este domingo en las que aparecen los príncipes de Gales compartiendo coche con el príncipe Andrés. Guillermo y Kate Middleton se encuentran apurando sus vacaciones en el castillo de Balmoral, en Escocia, en el que es el primer verano sin Isabel II. Siguiendo la tradición, este domingo la familia asistía a un servicio religioso en la iglesia de Crathie, una misa a la que el duque de York no quiso faltar.

Tal como muestran las instantáneas, el príncipe Andrés llegó al templo en el coche que conducía el futuro rey, sentado en el asiento del copiloto, mientras Kate Middleton ocupaba un lugar en la parte trasera. Ya en las imágenes de regreso al castillo aparece la pareja en la parte delantera, sin rastro del duque de York. Sin embargo, y aunque fue solo un trayecto, esta decisión de que Andrés se deje fotografiar junto a Guillermo y Kate demuestra que, al menos dentro de la familia, sigue siendo aceptado.

Lejos de repudiarlo por sus escándalos, el duque de York goza del beneplácito de los Windsor. Y no solo eso. Se deja que se le fotografíe junto a los herederos, quienes cuentan con la mayor popularidad dentro de la familia. Parece que ya no recuerdan que Andrés estuvo investigado por presunto abuso de menores y que todo se solucionó porque llegó a un acuerdo económico con la presunta víctima, Virginia Giuffre, para evitar el juicio.

Como era de esperar, las críticas en medios de comunicación y también en redes sociales no han tardado. Pocos entienden esta decisión de juntar en la misma imagen a los futuros reyes con Andrés, al que su madre retiró los honores militares y la capacidad para trabajar para la Corona. Los más conspiranoicos piensan que esto se deba a un mandato del rey Carlos III, que, envidioso de su hijo, quiere mermar su popularidad. Otros, la mayoría, aseguran que es una muestra de lo ya mencionado: a Andrés solo se lo ha repudiado públicamente, dentro de la familia sigue ocupando su puesto.

Lo cierto es que esta imagen no viene demasiado bien a Guillermo, quien la pasada semana recibió numerosas críticas por no asistir a la final del Mundial de fútbol femenino, en el que las españolas se impusieron a las inglesas. Desde Kensington Palace no se dio razón alguna para esa ausencia, y el príncipe se limitó a grabar un vídeo junto a su hija, la princesa Charlotte, en el que aseguraba "siento no poder acudir" y deseaba suerte a las Lionesses.

No está siendo, por lo tanto, un buen inicio de curso para Guillermo y Kate, quienes volverán a los actos institucionales la semana que viene. Estamos seguros de que la maquinaria de Buckingham Palace ya está funcionando al máximo para minimizar el impacto de estas dos polémicas consecutivas del futuro rey.