Exclusiva | Las Infantas visitan a don Juan Carlos en Abu Dabi días antes de su viaje a Inglaterra

La visita ha sido como un bálsamo para Juan Carlos I. La semana pasada, las infantas Elena y Cristina y dos de sus hijos, Irene y Miguel Urdangarin, volvieron de pasar unos días en Abu Dabi con el Rey expatriado. La visita no ha sido muy larga porque las hermanas de Felipe VI han tenido que encajarla en sus vacaciones, que han pasado en distintos puntos del país. Así, mientras doña Elena ha estado en Santander y Mallorca, la infanta Cristina ha viajado de Ginebra a Barcelona y a Bidart.

Visitar a su padre al final del verano se está convirtiendo en una tradición estival, como adelantábamos en Vanitatis. Las Infantas suelen tener una agenda apretada y un viaje a Emiratos siempre está en la lista. Sobre todo en los momentos en los que vivir allí es más difícil, como el verano, cuando el calor aprieta de forma intensa.

Don Juan Carlos ha manifestado a su entorno la alegría que suponen estas visitas, sobre todo cuando sus hijas van acompañadas de los nietos. El encuentro ha sido muy familiar y ha servido también para encontrarse con Felipe Froilán de Marichalar, que volvió a Emiratos hace unas semanas y vive en Dubái desde este mismo mes por motivos profesionales.

El encuentro familiar terminó a tiempo para que don Juan Carlos pudiera viajar a Reino Unido, donde participará estos días en la final mundial de la categoría 6M de vela. Tal como informan a Vanitatis, se le espera en la isla de Wight desde este mismo martes, que es el día en el que empiezan los ‘festejos’ de la competición.

La agenda de Juan Carlos I en Reino Unido será intensa. Vean: este martes 29 es el día en el que empieza el registro de embarcaciones y la toma de medidas. El jueves 31, a las cinco de la tarde, todos los tripulantes están citados a una reunión en la que se les darán las indicaciones necesarias para las regatas. El viernes 1 de septiembre y el sábado 2 serán los entrenamientos: hay dos al día. El domingo, a las 10 de la mañana, hay un encuentro y por la tarde se celebra una recepción inaugural para todos los inscritos.

A por el campeonato del mundo

Las regatas, en sí mismas, empiezan el día 4 y terminan el día 8 de septiembre. Y cada día hay celebraciones. El lunes 4, por ejemplo, en el club náutico de Cowes hay una fiesta inaugural y el martes 5 los propietarios de las embarcaciones están citados para una cena. Este tipo de encuentros son deportivos y sociales, por lo que la agenda, como advertíamos, es muy intensa. El miércoles 6 hay otra cena y el último día, el viernes, se celebra la entrega de trofeos.

El Bribón está inscrito, entre otros muchos barcos españoles, desde hace meses. Pero a diferencia de otras embarcaciones apuntadas, en las que aparecen todos los nombres de la tripulación, el Bribón se ha inscrito sin poner los nombres de sus tripulantes. Solo aparece Club Náutico de Sanxenxo. Tal como informan a Vanitatis fuentes directas, algunos de los regatistas que acompañan al Rey emérito en esta aventura están considerados los mejores del mundo y cuentan con distinciones internacionales. Muchos ya fueron a Sanxenxo este verano para entrenar con él. Porque la intención de don Juan Carlos y todo su equipo es ganar la Copa del Mundo.

Y así como en Sanxenxo el exmonarca se aloja en casa de Pedro Campos, en la isla de Wight lo hará en la de uno de los principales organizadores de la regata, amigo suyo desde hace décadas. La presencia del Rey jubilado en la isla de Wight ha sido muy frecuente durante años; se conoce cada palmo de la costa y a muchos de los ilustres residentes de este enclave.

Este amigo de don Juan Carlos cuenta con una casa grande y bien protegida. Es una especie de Pedro Campos a la inglesa, en el sentido de que cuenta con la total confianza del monarca. Lleva meses preparando y preguntando a amigos y conocidos, y está decidido a conseguir a los mejores navegantes para que el Bribón logre un buen puesto, si no el primero, en esta cita.

La categoría 6M es mucho más cómoda para él que la vela tradicional. Don Juan Carlos puede ir sentado durante todos los trayectos, con lo que no sufren ni sus rodillas ni sus caderas. Eso sí, las aguas de Wight son especialmente rebeldes y el tiempo no es plácido, con lo que ha necesitado entrenarse bastante antes de participar en el campeonato.

Lo pudimos ver en Sanxenxo, donde se preparó para este campeonato: está más delgado y tiene mejor aspecto. Ha seguido una dieta estricta, informan las mismas fuentes, y los entrenamientos en Abu Dabi han sido intensos y diarios. Lo han comprobado sus hijas estos días de primera mano y están “encantadas”, aseguran estas fuentes, de ver a su padre en tan buena forma.