Letizia retoma su historia de amor con Armani en Londres con este vestido nuevo

Armani siempre será una firma importante para doña Letizia. Aunque no es una de las que más suele utilizar, como son por ejemplo Carolina Herrera, Hugo Boss o en el pasado Felipe Varela, lo cierto es que la Reina siempre estará ligada a esta marca italiana, pues fue en la que confió para uno de los días más importantes de su vida: su pedida pública con el entonces príncipe Felipe, para la que eligió un sastre blanco que todos recordamos. A punto de cumplirse 20 años de esa fecha, doña Letizia ha elegido para un acto en Londres un vestido de Giorgio Armani.

Tras estar allí en mayo, en la coronación de Carlos III, dejándonos con dos lookazos impresionantes, la Reina ha regresado a la capital británica para un acto mucho más serio. Doña Letizia ha asistido al acto central del Día Mundial de la Investigación en Cáncer, en el que la AECC, de la que es presidenta de honor, promueve un movimiento global con el fin de acelerar los avances en la investigación en cáncer e incrementar el conocimiento por la sociedad sobre el valor y el impacto del esfuerzo investigador.

Al ser este un compromiso mucho menos festivo que la coronación, también lo era su estilismo, aunque seguía teniendo ese toque de elegancia tan propio de doña Letizia. El protagonista era un vestido que, aunque para nosotros es nuevo, pues no lo había llevado antes públicamente, pertenece a la colección prefall 2019 de Giorgio Armani. Nada extraño, pues ya estamos más que acostumbrados a esto de que Su Majestad luzca prendas de otras temporadas.

Nos encontramos ante un vestido de largo midi, realizado en seda azul marino con estampado de flores en rojo, rosa y verde, falda plisada, cuello alto, manga larga y bordes y bajo deshilachados. La cintura marcada del diseño hace que la silueta de la Reina se vea mucho más esbelta, sin necesidad de agregarle uno de esos finos cinturones que a ella tanto le gustan.

Como señalábamos anteriormente, doña Letizia confió precisamente en Giorgio Armani para su pedida de mano. El sastre blanco formado por chaqueta de cuello chimenea y pantalón palazzo se convirtió desde aquel momento en una pieza icónica de su vestidor, precisamente por el momento para el que lo lució. Además, en febrero de 2019, coincidiendo con el Día de los Enamorados, doña Letizia rescató el traje durante una visita de Estado a Marruecos, demostrando así su lado más romántico.

Desde que la eligiera para su pedida en 2003, la relación de la Reina con Armani ha estado llena de idas y venidas. No fue hasta 2017, durante su estancia en Japón, cuando la vimos de nuevo con un diseño de la firma. En aquella ocasión, Letizia estrenó un dos piezas de terciopelo negro con motivos florales y claras referencias orientales de la línea Armani Privé. En octubre de 2018, para el concierto previo de los Premios Princesa de Asturias, la veíamos de nuevo de Armani, con un vestido negro de líneas sencillas, abertura en la falda y un pequeño volante en un lateral.

En estos últimos años ha incorporado otros dos vestidos, aparte de este de Londres. En febrero de 2020, para una visita a Almonte, doña Letizia estrenó un Armani muy 'andaluz', un vestido en color blanco con lunares irregulares de negro. Asimismo, en noviembre de 2021 eligió un diseño negro ajustado, con tirantes y un pronunciado escote, con un drapeado en la cintura, para una cena de gala en el Palacio Real. Una elección que seguramente fue como guiño a sus invitados, ya que recibía al presidente italiano, Sergio Mattarella, y su hija Laura.

Pasemos ya a los complementos de doña Letizia, quien ha combinado de forma muy sobria su estilismo, con accesorios de CH Carolina Herrera: una cartera de mano, el modelo Baret, realizado en napa azul marino, y los slingbacks de ante que tiene en otras muchas tonalidades.

La Reina llevaba unos pendientes de Gold & Roses que estrenó cuando Rania de Jordania visitó España. Realizados en oro rosado y diamantes, representan unas estrellas, aunque las piezas son diferentes, una de ellas tiene tres estrellas y la otra solo dos. El anillo de Coreterno ponía el punto final a su estilismo.

Y de Londres a Nueva York, porque esta tarde doña Letizia intervendrá en Naciones Unidas para impulsar una resolución de la Organización Mundial de la Salud en 2024 en favor de la cobertura sanitaria universal para las personas con enfermedades raras. Eso sí, será una participación telemática, porque nuestra Reina, de momento, no puede estar en dos sitios a la vez.