El rey Juan Carlos se hace a la mar: los detalles de su primer entrenamiento en Sanxenxo

En la que está siendo la más tranquila de sus cuatro visitas a España desde que se exiliara a Abu Dabi en 2020, el Rey emérito abandonaba la casa de su amigo Pedro Campos para acudir al club náutico de Sanxenxo en un vehículo blanco, desde el que se le veía saludar a los periodistas que le preguntaban por su estancia en Galicia, pero sin detenerse a contestarles. Esta es ya su tercera visita este año, coincidiendo además con el debate de investidura de Núñez Feijóo y con la visita a Galicia de su hijo.

Una vez alcanzado su destino, el padre de Felipe VI observó los preparativos para poner a punto el Bribón mientras iba ataviado con gorra, gafas de sol y chaleco. Entre algunos gritos aislados de ¡"viva el Rey!", pudimos observarle en buena forma pese a ayudarse en ocasiones del bastón que le ha acompañado en anteriores ocasiones y de requerir cierta ayuda para bajar las escaleras hacia la embarcación.

Sonriente, saludó a los espectadores que habían acudido hasta las inmediaciones del club náutico, incluso llevándose la mano al corazón como gesto de agradecimiento, antes de acceder a su puesto en el Bribón para comenzar el entrenamiento que le ha servido para preparar la VIII Regata Rey Juan Carlos I que se disputará desde mañana en aguas pontevedresas.

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Compartiendo charlas y risas con sus compañeros de barco, se pudo ver a don Juan Carlos con muy buen ánimo antes de salir a alta mar dispuesto a repetir sus recientes éxitos deportivos. Recordemos que el emérito viene de ganar el Mundial de Vela en clase 6M en la isla británica de Wight. Aunque en esta ocasión, ante la imposibilidad de tomar parte activamente en la navegación, finalmente el padre de Felipe VI debió seguir al Bribón cada jornada de navegación desde una lancha y la tripulación, de su máxima confianza, respondió con creces.

El esposo de la reina Sofía está disfrutando de momento de una estancia tranquila en Sanxenxo, alojado en la casa del empresario Pedro Campos y de su mujer, Cristina Franze. En medio de una gran expectación mediática, con periodistas haciendo guardia a las puertas de la residencia, ya ha tenido tiempo de recibir la visita de algunos amigos.

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Laura G. Vara

El inicio de la competición coincidirá con una fecha señalada, ya que es la elegida por el rey Felipe VI para viajar también a Galicia, concretamente a La Toja, a tan solo 15 kilómetros de distancia de Sanxenxo, donde se encuentra su padre. El motivo de su presencia es la entrega del III Premio Foro La Toja, nombrado este año como Premio Josep Piqué, con el que se galardonará a las mujeres afganas. El monarca estará acompañado en este acto por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, pero no se prevé en esta ocasión un encuentro con el emérito.

Tras participar en la octava edición de la regata, que se celebrará en aguas de la ría de Pontevedra hasta el domingo, la previsión de Juan Carlos I es quedarse en nuestro país hasta el próximo lunes 2 de octubre, momento en el que emprenderá el regreso a los Emiratos Árabes Unidos.

De estas aguas que tan bien conoce don Juan Carlos guarda un buen recuerdo cercano en el tiempo, ya que el pasado mes de julio se hacía allí con la victoria en la clase 6 metros del XXIV Trofeo Hotel Carlos I de Silgar, donde la infanta Elena conseguía el tercer puesto con la tripulación del Alibabá II. Tras ese triunfo aseguraba que regresaría "muchas veces" a Galicia para seguir disfrutando de la vela, una afirmación que no ha tardado en hacer efectiva.