La foto familiar por los 18 años del príncipe Christian: un rifirrafe y un regalo secreto

Llegó el día. El que un día será el rey de Dinamarca alcanza este domingo la mayoría de edad. Y ya hemos sido testigos del primero de los actos que van a marcar en las próximas semanas esta cifra tan especial. Hablamos de la tradicional foto familiar por los 18 años del príncipe Christian. Un posado familiar que ha tenido lugar en el balcón del castillo Federico VIII, en el recinto de Amalienborg de Copenhague. Se trata de un gesto que se remonta a décadas de historia, ya que en su momento también vimos al padre, la abuela y el bisabuelo de protagonista del día celebrarlo así.

Pero volvemos a este 2023 para contar cómo ha sido esa foto de familia, que ha tenido un poco de todo, desde momentos de tensión a lágrimas, a pesar de tratarse de un posado que ha durado apenas dos minutos. A las 12:02 de la mañana se abrían los ventanales de ese famoso balcón, con la explanada delantera hasta arriba de daneses deseosos de felicitar el cumpleaños a su príncipe. En ese momento se veía ya a Christian, que salía saludando y sonriendo, agradecido por las muestras de cariño. Solo unos segundos después se unían a él sus padres y sus hermanos.

Y era en ese instante cuando veíamos otro pequeño rifirrafe entre Isabella y la princesa Mary de Dinamarca. Los gestos y el lenguaje corporal de madre e hija nos mostraban un momento tenso entre las dos. Y aunque no parece ni el momento ni el lugar para un desencuentro, lo cierto es que no es nada nuevo entre ellas, ya que la joven ha demostrado su carácter en público en no pocas ocasiones, haciendo que fuera la australiana la que tuviera que salir del paso, poniendo su mejor sonrisa para las fotos y haciendo como si no pasara nada, exactamente lo mismo que ha sucedido en esta ocasión.

A las sonrisas y los saludos de los príncipes Federico y Mary con sus cuatro hijos les ha seguido la aparición de la reina Margarita, orgullosa de ver el despliegue de banderas danesas y del cariño con el que se estaba tratando a su nieto y futuro rey. Por supuesto, no ha faltado ni el 'Cumpleaños feliz' ni esos tradicionales 'hurras' que siempre se dedican al cumpleañero. Además, en esta ocasión ha sido la propia monarca la que los ha pedido al público y no tres veces, como es habitual, sino nueve. Y es que no es una ocasión cualquiera, ya que un rey o reina danés no celebraba los 18 años del futuro heredero desde hacía 135 años, debido a las muertes prematuras que ha habido dentro de la Corona.

El especial regalo de Margarita de Dinamarca a su nieto

Y casi al mismo tiempo, la Casa Real informaba de que la monarca le había otorgado a su nieto, en un acto privado, la Orden del Elefante, la más alta distinción del reino de Dinamarca y que tienen numerosos royals europeos, incluyendo a don Juan Carlos y doña Sofía, el fallecido duque de Edimburgo, Máxima de Holanda o Ingrid de Noruega. Una distinción que, muy posiblemente, el rey Felipe también recibirá el próximo mes de noviembre, cuando, junto a doña Letizia, realice esa esperada visita de Estado al país.

Este posado familiar ha sido solo un pequeño aperitivo del siguiente acto, la cena de gala, con la asistencia confirmada de varios royals europeos. El 'dress code' marca vestidos largos y tiaras para ellas, y uniformes o fracs para ellos, con las correspondientes condecoraciones en cada caso. Todo un despliegue de looks y joyas en el que no se espera presencia española. Las celebraciones de Christian de Dinamarca son también la antesala de lo que viviremos en pocos días en nuestro país, con esa mayoría de edad de la Princesa de Asturias. Aunque, como saben, serán unos actos mucho menos pomposos y más institucionales y familiares.