La asturiana que hizo que Letizia cambiara sus diamantes por unos pendientes hechos con manzana

Cuando hablamos de mujeres de la realeza, siempre nos vienen a la cabeza grandes joyas, como históricas tiaras o valiosísimas piedras preciosas. Sin embargo, a algunas royals también les gusta llevar otro tipo de alhajas, como es el caso de doña Letizia, quien demostró el pasado fin de semana que no tiene problema ninguno en dejar de lado los diamantes y el oro para ponerse unos pendientes hechos con restos de manzana.

Así ocurrió el sábado, durante la visita de la familia real al Pueblo Ejemplar de esta edición. Cuando la Reina llegó a Arroes, una de las tres parroquias de Villaviciosa galardonadas, llevaba unos pendientes formados por un triple aro realizado en oro rosado y diamantes de Gold & Roses, firma española de la que tiene numerosos modelos. De hecho, la Princesa de Asturias llevaba también unos pendientes de la misma firma, los Skyline Crawler, propiedad de su madre.

Y aunque la Reina les tiene mucho cariño a sus pendientes de Gold & Roses, no dudó en cambiárselos después de 'enamorarse', durante su recorrido por Arroes, de un diseño artesanal y sostenible hecho por Patricia Escobar, creadora de Mondo Manzana.

Tal como cuenta a Vanitatis la propia Patricia, desde la Asociación de Vecinos de Arroes le pidieron que hiciese algunas piezas para regalar tanto a doña Letizia y a sus hijas como a don Felipe en nombre del pueblo. Además, puso un puesto en un mercado artesanal que visitaron los Reyes, Leonor y Sofía. La Reina quedó embelesada con aquellas piezas, sobre todo conociendo el origen de los materiales y el proceso con el que se hacen.

Mondo Manzana nació hace cinco años, creada por Patricia Escobar, quien contaba con una amplia experiencia en talleres de reciclaje creativo. Preocupada por la basuraleza, le surgió la idea de trabajar con la magaya, que no es nada más que el resto de la manzana después de hacer la sidra. "Empecé a experimentar con el material, pero al ser orgánico pronto se corrompía, por lo que tuve que encontrar la manera para que durase en el tiempo. Es una fórmula secreta que yo misma creé", nos cuenta la artesana.

El "esto nunca lo hago" de Letizia

Y continúa: "Al pasar la familia real por mi puesto se quedaron muy sorprendidos de que de un residuo como la magaya saquemos esto. Y mientras el Rey preguntaba acerca del proceso, la Reina me dijo que quería unos pendientes. Primero se probó unos en un azul turquesa, y se estuvo mirando al espejo, pero luego, al ver los verdes, pensó que le quedaban mejor con el jersey que llevaba puesto".

"Esto no lo hago nunca", le dijo doña Letizia a Patricia Escobar, quitándose los diamantes que llevaba y cambiándolos por un original diseño, en el que aparecen dibujados una manzana y una botella de sidra.

Doña Letizia pagó los pendientes, que hacían conjunto con su jersey tie-dye de la firma Psophía, y los lució durante todo el día. "Para mí es un gran orgullo, aunque estoy un poco asustada por toda la repercusión, tengo muchos encargos y el proceso es largo, porque, por ejemplo, los pendientes de la Reina tardan tres meses en secarse, ya que es todo artesanal", nos explica Patricia, quien destaca la ligereza de sus diseños.