¿Y si la princesa Leonor no quisiera ser Reina? Esto es lo que pasaría si decidiera no heredar el trono

El 31 de octubre, la princesa Leonor cumple la mayoría de edad. En este mismo día, la heredera al trono jura la Constitución ante las Cortes Generales, un momento muy esperado y un paso más en la vida de la hija de Felipe VI y Letizia, imprescindible para que se perpetúe la institución de la Monarquía.

Todo parece encaminado a la perfección para lograr el objetivo de que se mantenga el trono de España. Desde que nació, La princesa Leonor ha sido formada para que el día de mañana pueda ser Reina.

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R. R.

Pero hay una posibilidad, sabemos que muy remota, sí, pero no por ello inexistente, que nadie contempla, precisamente por ser prácticamente inconcebible. Nada hace sospechar que Leonor no quiera asumir su futuro como Reina. Toda su formación, insistimos, está encaminada a ello y la Princesa la está asumiendo con seriedad, firmeza y total convencimiento. Pero, ¿y si llega un día en el que la primogénita de los Reyes decide que no quiere ser Reina? No sería la primera vez que ocurre en el seno de una Casa Real.

Para aclarar los pasos que se tendrían que dar desde la institución monárquica en caso de que este futurible se convirtiera en realidad, hemos consultado a un experto constitucionalista.

El artículo 57 de la Constitución señala que “las abdicaciones, renuncias y cualquier duda de hecho o derecho que ocurra en el orden de sucesión se resolverán por una ley orgánica”. ¿Qué propone esa ley orgánica en caso de que Leonor renuncie a ser Reina y cuáles serían los pasos a seguir?

El experto consultado nos aclara que “la respuesta la encontramos en el mismo artículo 57 porque la línea sucesoria está en los herederos de Juan Carlos I. La regulación de la orden de primogenitura en España no contempla la ley sálica, por eso heredó Isabel II antes del hermano de Fernando VII, pero es verdad que se prefiere la línea de varón que a la línea de mujer. Aun así, siempre el orden de primogenitura supone que el primero que nace es el que se hace con la herencia. La ley orgánica probablemente lo que ordenaría sería el orden regular de la sucesión. Si Leonor renunciara al trono, heredaría Sofía, y si Sofía también renunciara, heredaría la infanta Elena, que es la siguiente en el orden sucesorio. Si la infanta Elena renunciase, heredaría su hijo Froilán, antes que la infanta Cristina, que es la tercera en el orden sucesorio. La ley orgánica determinaría la abdicación de Leonor y la subida al trono de la infanta Sofía”.

Puestos a imaginar, imaginemos que Leonor no renuncia al trono pero que Felipe VI y Letizia deciden tener otro hijo y nace un niño. El artículo 57 de la Constitución dice: “La sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores; en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer, y en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos”. En el improbable caso de que Felipe VI y Letizia se convirtieran en padres de un niño, ¿perdería Leonor su posición como heredera al trono? En este caso, nos explican: “Si Felipe VI y Letizia se convirtieran en padres de un niño, como la línea de varón es preferible a la de mujer, heredaría el trono ese niño. De hecho, es algo que ya ha ocurrido, porque cuando heredó Alfonso XIII, que nació Rey, existía una Princesa de Asturias, que era la princesa María Teresa. Cuando nació Alfonso XIII, ella dejó de ser Princesa para convertirse Alfonso XIII en Rey. En el caso de que Felipe y Letizia adoptasen a un niño, estaríamos en el mismo caso. Ese niño sería Rey antes que Leonor y que Sofía".

Tras aclarar estas cuestiones, trasladamos al experto consultado la incomprensión que puede provocar el hecho de que la Constitución contenga un artículo que contradice a otro incluido en la misma, el 14, en el que se garantiza la igualdad de los españoles ante la ley “sin que pueda prevalecer discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión”. Al respecto, nos comenta que “hay que tener en cuenta que el derecho de la familia real es un derecho especial, es un derecho aplicable sólo a una familia en España, que es la suya. El artículo 14 no es claramente aplicable al derecho especial que supone el derecho de la familia real. Aunque el Supremo y el Constitucional han intentado cohonestar, es decir, unir el derecho especial al normal que se nos aplica a cualquier español, como ha ocurrido por ejemplo en la regulación sucesoria de los títulos nobiliarios, que ahora prioriza siempre al nacido primero, sea hombre o mujer, en el caso del derecho de la familia real aún no se ha logrado. Es un derecho muy especial, que solo se aplica a una familia, y es un derecho que casi ha empezado a existir con la abdicación de Juan Carlos I".