Meghan Markle: traje de chaqueta, cárdigan de Carolina Herrera y amapolas para honrar a los caídos en guerra

La presencia mediática de los Sussex en Estados Unidos no tiene fin. Incluso en semanas en las que homenajean, desde lejos, a los británicos caídos en guerra. Este martes, Meghan Markle y el príncipe Harry acudieron a un acto en San Diego para honrar a los veteranos de la Marina de los Estados Unidos. Lo hicieron luciendo en sus solapas las insignias de amapolas de la Legión Real Británica, en lo que supone un homenaje a los caídos en guerra del pueblo británico. Lo hacen, eso sí, desde su actual residencia estadounidense.

Con su presencia en San Diego, los duques de Sussex apoyaron a la Fundación Navy SEAL en la inauguración de una nueva base de entrenamiento, preparada para un "programa de acondicionamiento físico para guerreros de la costa oeste", según informa este jueves el 'Daily Mail'. El acto ha tenido lugar dos días antes del Día de los Veteranos, que se celebra el 11 de noviembre.

Para el acto, Meghan lució un elegante traje de chaqueta de color oscuro, en el que llevaba bordada la mencionada amapola en honor de los caídos en servicio desde la Primera Guerra Mundial hasta la actualidad. Como en otras ocasiones, la que fuese protagonista de 'Suits' llevó el pelo recogido y mostró su cara más amable, la que la ha convertido en un baluarte en este tipo de actos benéficos en Estados Unidos.

Unas horas antes, la duquesa de Sussex lució un cárdigan de Carolina Herrera (valorado, según 'Daily Mail', en 1.490 dólares) en otro acto relacionado con los militares veteranos y sus familias que tuvo lugar en el Camp Pendleton en San Diego. Tanto el príncipe Harry como su mujer se interesaron por Operation Bigs, un programa de tutoría dedicado a hijos de familias de militares, incluidas las de aquellos que están en servicio activo.

En las imágenes publicadas por la web de la Fundación Archewell, los duques también hacen gala de las significativas insignias de amapola para mostrar su recuerdo a los caídos. Un recuerdo que siempre ha sido especialmente relevante para la familia real británica, tal y como muestran algunos de los actos que tienen lugar este jueves en el Reino Unido.

De hecho, lejos de Estados Unidos, ha sido la reina Camila la que esta misma mañana ha realizado una ofrenda floral a los caídos rigurosamente vestida de negro. La noche anterior, tanto ella como el rey Carlos IIII organizaron una recepción para la Fundación Turquoise Mountain, una ONG establecida en Escocia. En la solapa del monarca británico también lucía una amapola para conmemorar la significativa fecha, muy recordada por el pueblo británico.

La última vez que vimos a los duques de Sussex fue para disfrutar, junto a unos amigos, del recital que ofreció Katy Perry en Las Vegas. La intérprete de éxitos como 'Roar', 'I kissed a girl' o 'Firework' ofreció un gran concierto en el que los duques disfrutaron como unos groupies más y en el que pudimos ver a Meghan Markle luciendo un minivestido de Valentino, concretamente una pieza en negro con apliques florales que cuesta unos 6.400 euros.