La infanta Cristina viaja por sorpresa a Barcelona para no dejar solo a su hijo Pablo en su 23º cumpleaños

A las 10 en punto de la mañana de este miércoles 6 de diciembre, la infanta Cristina aterrizaba en Barcelona. Sorpresa, sorpresa. La hermana de Felipe VI, 'mater amantisima', no iba a permitir que su hijo Pablo estuviera solo el día de su 23º cumpleaños. El joven tenía previsto celebrarlo con su novia, Johanna Zott, pero “por motivos ajenos a ella" la chica no pudo llegar a Barcelona, tal como informaron a Vanitatis fuentes de la familia.

Así que ha sido su madre quien se ha 'plantado' en la ciudad para estar con Pablo. Johanna estudia en la universidad de Múnich desde el pasado octubre con una beca Erasmus.

Este miércoles, la Infanta ha ido incluso a las oficinas de La Caixa, que en pleno festivo por la Constitución no tenían previsto abrir. Este jueves seguirá con sus labores profesionales en la sede de la entidad financiera. Antes, eso sí, toca celebrar el cumpleaños. Doña Cristina tenía previsto cenar con su hijo en Barcelona y, aunque no lo hemos podido confirmar al 100%, todo indica que ha venido acompañada de su hija, Irene.

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Porque la agenda cumpleañera de Pablo y su madre se alarga. Cristina de Borbón se queda en Barcelona hasta el domingo, así que aprovechará su estancia para acudir el viernes al partido que el club de Pablo, el Frankin Granollers, disputará contra el Puente Genil de Córdoba. Se espera que acuda, con toda probabilidad, acompañada de Irene Urdangarin y de algunos amigos de toda la vida. También está previsto que vayan los Zott, los padres de la novia de Pablo, fieles fans de la carrera deportiva del joven.

Los padres y hermanas Zott

La relación de Pablo con su ‘familia política’ es muy buena e intensa. Este pasado fin de semana, por ejemplo, lo ha pasado el joven en casa de sus ‘suegros’ en Esplugues de Llobregat. Pablo esperaba la llegada de Johanna y lo hacía acompañado de los padres y las hermanas Zott, quienes se han convertido en su familia postiza en Barcelona.

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Ante la ausencia de la joven se activó el Plan B y la Infanta ha decidido estar junto a su hijo. Lo curioso es que si bien doña Cristina tiene fijada su residencia en Ginebra, lo cierto es que pasa más tiempo en nuestro país que en Suiza. La semana pasada, sin ir más lejos, estuvo casi todos los días en Barcelona, donde la pudimos ver en actos públicos por motivos laborales. Y aprovechó, como siempre hace, para estar con sus hijos Pablo en Irene, con quienes la pudimos ver cenando en un restaurante cercano a su hotel.

Pocos días en Ginebra

La hermana de Felipe VI estuvo otra semana en Barcelona en el mes de noviembre. Aprovechó su viaje para acudir a la fiesta de la princesa Leonor en el Pardo para visitar a sus hijos en Barcelona. Y tras la celebración de su sobrina, volvió a Barcelona, donde tuvo varios compromisos laborales. El mismo lunes 6 de noviembre, hace justo un mes, se desplazaba hasta Figueres para asistir a la inauguración de 'El Cristo', una de las obras más emblemáticas de Salvador Dalí. La Infanta acudía en calidad de miembro del patronato de la Fundación Gala Dalí, una entidad en la que siempre ha estado muy involucrada tal y como informan desde la organización.

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Así pues, Barcelona es ya casi la primera residencia de la infanta Cristina, quien se resiste a abandonar Ginebra pero pisa poco su casa en esa ciudad. Los motivos de su visita de este puente de la Purísima están más que justificados, sobre todo en su figura. Porque siempre ha antepuesto el interés de sus hijos a los suyos propios y estar con Pablo en su 23º cumpleaños era una prioridad.

Foto carné en el móvil

Y de paso, Pablo no se queda 'compuesto y sin novia' en su celebración. Con todo, la desilusión de poder ver a Johanna no se la quita nadie. Desde su familia informan de que ante los problemas que ha tenido Johanna para poder viajar a España, “los novios no se volverán a ver hasta Navidades, y eso les pesa sobremanera”. Lo dicen porque aseguran que la relación entre ellos es muy intensa y están tan entregados que ambos llevan en las fundas de su móvil una foto de carné del otro.

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Johanna, estudiante de Medicina, se fue a una universidad de Múnich a mediados de octubre y desde entonces la pareja solo se ha visto una vez. Fue los últimos días de ese mismo mes, justo cuando Leonor cumplía 18 años y se organizó una gran fiesta en el palacio de El Pardo para amigos y familiares. Se esperaba la presencia de Pablo, pero el joven prefirió ir a ver a su novia antes que estar en la celebración de su prima.