Una tiara modificada y vestidos reciclados: los looks de Silvia, Victoria y Sofía de Suecia para su cena de gala con los Nobel

Siguiendo la tradición iniciada a inicios del siglo XXI, la familia real sueca presidía este pasado 10 de diciembre la ceremonia de entrega de los Premios Nobel 2023 bajo la máxima etiqueta. Así, los chaqués, vestidos de gala, tiaras y las correspondientes condecoraciones de cada miembro se hacían con parte del protagonismo de los galardones internacionales dedicados a las personas e instituciones que hayan llevado a cabo investigaciones, descubrimientos o contribuciones notables a la humanidad en el año anterior.

No obstante, a pesar de que Narges Mohammadi, reconocida en la categoría de Paz por su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán, o Jon Fosse, gran autor de teatro y prosa, entre otros premiados, vivieron su gran momento la pasada velada. Hoy, la Corona nórdica ha querido continuar visibilizando su labor a través de una cena de gala, acontecida hace escasos minutos en el Palacio Real de Estocolmo, donde, por supuesto, los looks de Silvia, Victoria y Sofía, junto al joyero histórico, han vuelto a ser motivo de titulares.

A pesar de sus diversos estilos, las mujeres de la Corona han encontrado dos puntos en común en esta velada: optar por diseños reciclados y recurrir a sus tiaras preferidas. En primer lugar, la heredera al trono ha posado con un vestido trampantojo conformado por una blusa satinada blanca de cuello redondo y manga corta y una falda larga de vuelo, confeccionada en tejido de base negro con estampación de margaritas blancas, la cual pertenece a la diseñadora Camilla Thulin y estrenó en el año 2019.

Tal elección ha sido acompañada por la tiara de diamantes de Connaught, regalo de los duques de Connaught, Arturo de Sajonia-Coburgo-Gotha y Luisa Margarita de Prusia, a su hija primogénita, Margarita, con motivo de su boda en 1905, con el príncipe Gustavo Adolfo, futuro rey de Suecia. La pieza, creada por E. Wolff & Co, se encuentra completamente realizada en diamantes con diferentes tipos de talla, los cuales conforman cinco bucles, símbolos del amor.

Por otro lado, su madre ha rescatado de su fondo de armario el vestido que escogió para asistir a la boda de su hija Magdalena. El modelo gris de suave escote pico, hombrera marcada, manga larga y falda con sutil cola completamente bordada con motivos barrocos, realizados en pedrería, además de por un chal a conjunto, se ha visto accesorizada por la tiara de Leuchtenberg.

Dicha joya neoclásica, construida con una base de diamantes talle brillante y siete puntas rematadas por imponentes zafiros, fue regalo del emperador Napoleón a su hijastro, Eugenio de Beauharnais, duque de Leuchtenberg, por su boda con la princesa Augusta Amalia de Baviera en 1806 y cuenta, a su vez, como nos ha demostrado Silvia de Suecia en esta ocasión, con pendientes y collar a juego.

Su nuera, Sofía, esposa del príncipe Carlos Felipe, ha hecho gala de la importancia de la segunda vida de las prendas al reconvertir un diseño de Ida Lanto que estrenó en 2017. La pieza roja de falda de volumen, confeccionada en tejido satinado, cambiaba su corpiño de tirantes anchos con escote redondo por una parte superior cruzada de escote bardot, que sumaba un corte off-shoulder al vestido.

Además, la royal no modificaba únicamente la prenda, sino que también decidía prescindir de la parte superior de esmeraldas de su tiara favorita, la cual le regalaron sus suegros por su boda, para lucir su base de diamantes en talla brillante de nueve puntas.

En la noche anterior…

Lejos de quedarse atrás, las damas de la familia Bernadotte han seguido probando su poder estilístico para la que consideran una de las citas más relevantes de su agenda anual, la cual ha vuelto a ser obviada por Magdalena de Suecia, quien dejó de asistir desde que se mudase al extranjero.

En el caso de Victoria de Suecia, que repitió por primera vez look en este evento, combinó la tiara de amatistas con pendientes y broche a juego con un diseño largo en tonalidad berenjena de escote asimétrico fruncido y rematado con una gran flor, cinturilla alta marcada y falda de volumen con tablas anchas de silueta A.

A su vez, la reina Silvia posó con un modelo rosa palo de corpiño de manga larga y escote redondo, bordada completamente por motivos florales de pedrería, y falda satinada de corte abombado. Este fue rematado por la tiara de las nueve puntas, una de las más importantes del joyero de la Corona, realizada en diamantes talla brillante.

Por último, la princesa Sofía, esposa de Carlos Felipe, acompañaba dos collares de Swarovski y la tiara de esmeraldas que sus suegros le regalaron con motivo de su boda en 2015 con un diseño negro de cuello redondo, hombrera redondeada manga larga y falda fruncida.