El príncipe Andrés, “devastado” y “atrincherado”, se niega a ceder frente a Carlos

El príncipe Andrés vuelve a ser protagonista de los titulares al aparecer en los documentos publicados por el tribunal de Nueva York sobre el caso Epstein.

La denuncia por agresión sexual contra el tío del príncipe Guillermo y el príncipe Harry ya fue archivada hace tiempo tras llegar a un acuerdo con la víctima que la interpuso. Sin embargo, el revuelo y la polémica en torno a la figura del hermano del Rey Carlos III ha vuelto a avivarse en estos días tras hacerse público el informe en el que aparece el nombre de las personas relacionadas con el magnate y las acusaciones hacia cada una de ellas. En el documento se relaciona al hijo de Isabel II con actos de abuso sexual y con la participación en una orgía con menores.

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Laura G. Vara

El padre de Eugenia y Beatriz de York ha negado una y otra vez las acusaciones, pero no ha podido evitar que, una vez más, su nombre sea vinculado a este tipo de actos repudiables.

El medio británico 'Daily Mail' se ha puesto en contacto con una fuente cercana al duque de York que ha asegurado que el hijo de la reina Isabel II se encuentra completamente aturdido por las nuevas y escabrosas afirmaciones. "Él no tiene el suficiente ancho de banda emocional para lidiar con todo esto. Se ha encerrado en una habitación y no tiene idea de cómo responder. Está devastado”.

El escándalo obligará, irremediablemente, al rey Carlos III a actuar y a dar un paso más en la expulsión definitiva del príncipe Andrés de la Casa Real. Según el medio británico mencionado, ya existían planes para expulsarlo de Royal Lodge, la casa de diez habitaciones en Windsor en la cual reside desde el año 2003. Tras esta nueva polémica, parece que Carlos III ya no puede mirar más hacia otro lado y que se verá forzado a presionar a su hermano para que abandone su hogar y sea trasladado a una residencia más pequeña.

Sin embargo, desde ‘The Mirrow’ afirman que Andrés no está dispuesto a ponerle las cosas fáciles a su hermano y que se opondrá con firmeza a cualquier intento de sacarlo de la mansión.

Una fuente consultada por este medio británico ha asegurado que “Andrés no irá a ninguna parte. El rey no puede obligarle a salir. Tiene un contrato de arrendamiento de hierro fundido que tiene absolutamente toda la intención de cumplir”.