El príncipe Harry ha vuelto a casa: los detalles de su llegada a Reino Unido para estar con Carlos III

Ha sido, sin duda, la noticia de la semana a nivel mundial. El rey Carlos III padece cáncer, tal y como anunciaba Buckingham Palace en un comunicado este lunes por la tarde. Los titulares no se hicieron esperar y uno de ellos estaba protagonizado por su hijo pequeño, cuyo portavoz confirmaba que sabía la noticia y viajaría a Londres no tardando mucho. Y solo unas horas después de conocer la noticia, el príncipe Harry ha vuelto a casa. Su llegada a Reino Unido ha sido este martes por la mañana, en vuelo regular y, un detalle importante, con seguridad.

Numerosos fotógrafos, tanto estadounidenses como británicos, permanecían desde el lunes por la noche atentos a los posibles movimientos del duque de Sussex, a quien finalmente se ha visto saliendo en un vehículo todoterreno de la terminal de Heathrow, en Londres, tras un vuelo de once horas desde Los Ángeles.

El príncipe Harry viajaba solo, sin su esposa, Meghan Markle, y sus dos hijos, Archie y Lily, que se han quedado en Santa Bárbara, a pesar de que la zona sufre estos días los efectos de una gran tormenta que ha provocado varias inundaciones y la alerta aún se mantiene.

Lo más llamativo de la llegada del duque de Sussex a Reino Unido, además de la premura con la que ha viajado desde Los Ángeles, es que ha contado con seguridad para salir del aeropuerto, un tema que ha traído cola desde que le retiraran la escolta y que incluso llevó a los tribunales. La comitiva estaba formada por dos todoterrenos y dos coches de policía que encabezaban y cerraban el grupo.

A partir de ahí, y precisamente por esas medidas de seguridad, se perdía la pista del hijo pequeño de Carlos III. De hecho, hay una gran incógnita en torno al lugar donde se alojará durante estos días que pasará en su país. Aunque su cuartel general para sus estancias era Frogmore Cottage, la residencia que le regaló por su boda la reina Isabel, la publicación de sus memorias hizo que su padre le reclamara esta propiedad y en su última visita, el pasado septiembre, ya se hospedó en un hotel.

En lo que sí coinciden los expertos reales es que este viaje exprés del príncipe Harry va a servir para que acerque posturas con el rey, ya que todas las declaraciones públicas que ha hecho el duque de Sussex en los últimos años tanto en soportes audiovisuales como en su autobiografía han hecho que la cuerda se haya tensado al máximo.

Lo que no está tan claro es si Harry visitará a su hermano y su cuñada, aprovechando su visita a Londres. Tampoco ellos pasan por su mejor momento tras el ingreso de Kate Middleton en el hospital por esa cirugía abdominal de la que no han trascendido más detalles. Pero, ahora mismo, la princesa de Gales descansa en su casa y la agenda de Guillermo, aunque la retoma este miércoles, se ha visto muy reducida, por lo que es una buena ocasión para tener un encuentro y limar asperezas.

Es en Clarence House donde también descansa el rey Carlos mientras recibe tratamiento, del que tampoco se han especificado detalles, y es allí donde ha ido a verlo el príncipe Harry nada más aterrizar. Es la segunda visita que trasciende, ya que la princesa Beatriz de York y su marido, Edo Mapelli, salían este martes de esta propiedad tras pasar unas horas con él.

Y mientras, la actividad oficial del resto de la familia real sigue su curso. Será la reina Camila la cabeza visible de la Corona, ya que no tiene intención de aparcar su agenda. También la duquesa de Edimburgo, que se encuentra en Francia, y la princesa Ana, dos activos muy importantes para Buckingham, mantienen sus compromisos oficiales. Y, como decíamos, el príncipe Guillermo retomará sus actividades públicas este mismo miércoles, una aparición que genera máxima expectación.