Kate Middleton es la prioridad número uno del príncipe Guillermo tras su estancia en el hospital

El príncipe Guillermo seguirá dando prioridad a Kate Middleton y al bienestar de sus hijos por encima de sus obligaciones reales a tiempo completo, tras decidir despejar su agenda para apoyar a su esposa mientras se recupera de una operación abdominal. Todo ello en un momento en el que la 'monarquía adelgazada' que ha decidido impulsar Carlos III en Inglaterra se encuentra bajo mínimos por razones médicas.

Aunque el heredero al trono retomaba su actividad pública el miércoles con sendos actos, no se espera que regrese todavía de lleno a sus deberes institucionales. El príncipe de Gales esta volcado tanto en el cuidado de Kate Middleton como en el apoyo a su padre tras su reciente diagnóstico de cáncer.

Guillermo volvía de forma breve al trabajo primero con una investidura en el castillo de Windsor en nombre del rey, donde también desvelaba de forma emotiva un pequeño secreto sobre la estancia de su esposa en el hospital. Por la noche, asistía a una cena de gala en el centro de Londres en su papel de patrocinador de la London Air Ambulance, donde coincidía además con Tom Cruise.

Después de este doble compromiso, sin embargo, no tiene más deberes programados esta semana y estará al lado de Kate y sus tres hijos –el príncipe George, de diez años; la princesa Charlotte, de ocho, y el príncipe Louis, de cinco– de nuevo la próxima semana durante sus vacaciones escolares. El royal siempre ha dejado claro que, en esta etapa de su vida, su deber con su familia está por encima de su papel público.

Los expertos en la realeza dan por hecho que su equipo de Kensington Palace está en permanente contacto con sus homólogos de Buckingham sobre los compromisos públicos a los que Guillermo podría asistir en lugar de su padre en el futuro cercano. Uno de ellos podría ser el funeral por el rey Constantino de Grecia que tendrá lugar el próximo 27 de febrero.

Otros compromisos en los que el príncipe Guillermo podría sustituir a Carlos III serían nuevas investiduras o tal vez encabezar a la familia real en actos como el servicio anual del Día de la Commonwealth en la abadía de Westminster a principios del mes que viene. Pero dado que el monarca ha mostrado ya su intención de mantenerse firmemente en el timón de los asuntos de Estado durante su tratamiento, es poco probable que el futuro rey tenga que hacerse cargo de ningún asunto de capital importancia.

Del mismo modo se cree que Guillermo, de 41 años, cuenta con el apoyo al cien por cien de su padre para volver a su ritmo al trabajo. El rey ha pasado cada vez más tiempo en el castillo de Windsor desde su llegada al trono, a menudo quedándose a dormir allí los domingos por la noche, lo que le ha permitido estar más con su hijo mayor y sus nietos, a los que está cada vez más unido.

El príncipe de Gales, que ahora vive en Adelaide Cottage, en la finca de Windsor, a poca distancia del castillo, también utiliza a menudo salas de la histórica residencia real para celebrar sus reuniones de trabajo. Allí es donde se recupera también Kate Middleton, que ingresó inesperadamente en el hospital el mes pasado para someterse a lo que tan solo se ha descrito como una "cirugía abdominal".

Pasó dos semanas en la London Clinic, donde Carlos III también se sometió a su operación de próstata, y es poco probable que vuelva a desempeñar sus funciones reales hasta después de Semana Santa.