La escapada a Atenas de la reina Sofía tras el funeral de Víctor Manuel de Saboya

La basílica de Superga, en Turín, fue el escenario este pasado sábado del solemne funeral de Víctor Manuel de Saboya. Entre los miembros de la realeza presentes en el sepelio pudimos ver al príncipe Alberto de Mónaco, sin la compañía de su esposa, Charlène. También fue destacada la presencia de Carlos Luis de Orleans, Carlos de Borbón-Dos Sicilias y su hija María Carolina, Philippos de Grecia y el príncipe Leka de Albania. La representación española, por sorpresa, corrió a cargo de la reina Sofía, que, de riguroso luto, saludaba sonriente a los fotógrafos a la entrada del templo.

Doble sorpresa ha sido que, en lugar de regresar a España tras el funeral, la Reina emérita haya decidido, aprovechando la corta distancia, viajar a su tierra natal en compañía de su querida hermana Irene. Así lo aseguran medios locales que confirmaban la presencia de ambas royals en Atenas este fin de semana.

Sofía e Irene fueron fotografiadas en uno de los centros comerciales más exclusivos de la capital griega, el Golden Hall, ubicado en el barrio de Marusi, al nordeste de la ciudad, y donde se encuentran las tiendas más elegantes de la zona.

Este viaje a Grecia, un país al que sigue muy unida, es el segundo que realiza este año. El anterior fue el pasado 10 de enero con motivo del primer aniversario del fallecimiento de su hermano, el rey Constantino. La royal, acompañada por sus hijas Cristina y Elena, quiso estar con los suyos en una fecha tan especial, en la que se rindió homenaje al fallecido con una ceremonia privada celebrada en la iglesia de la Resurrección, en los jardines del palacio de Tatoi.

Al emotivo acto asistieron también la viuda de Constantino, Ana María, que estuvo rodeada por sus hijos. A su llegada la pudimos ver acompañada por Alexia y Pablo, sus dos vástagos mayores. Este viaje supuso el regreso a Grecia de la emérita, un año después de que falleciera su hermano y confidente, al que se recordará de nuevo a finales de este mes en Londres.

Esta ha sido una nueva ocasión para ver juntas a ambas hermanas, que forman un unido frente común en numerosas apariciones públicas y privadas. Desde irse las dos a un hotel de lujo en Ginebra a pasar unos días de relax hasta disfrutar de varias citas musicales en Madrid, la última de ellas al son de la música de un buen amigo de la reina Sofía como es Zubin Mehta.

En solitario también ha demostrado la madre de Felipe VI que, pese a sus 85 años, no baja el pistón a la hora de tener una agenda intensa. La semana pasada la vimos primero lucir un llamativo clavel rojo en la solapa mientras presidía la reunión de la Junta de Patronos de la Escuela Superior de Música junto a Ana Botín.

Poco después, se desplazaba hasta Huelva para presidir un acto con fines solidarios, enmarcado dentro de sus compromisos con la fundación que lleva su nombre. En este caso, la visita al Banco de Alimentos de la ciudad andaluza.