La reina Sofía recibe la Medalla de Oro de las Islas Baleares con un original traje rojo de puños acolchados

La reina Sofía ha viajado hasta la isla de Mallorca para ser condecorada con la Medalla de Oro de las Islas Baleares. El portavoz del Govern balear, Antoni Acosta, afirmó durante una rueda de prensa que la distinción se le concede "por su entrega sin fisuras a los proyectos solidarios que emprende y que redundan en beneficio de la sociedad y por su vinculación y promoción de las Islas Baleares".

Para tal ocasión, doña Sofía ha escogido un conjunto monocromático en rojo. Arriba, una blazer con puños acolchados, una blusa por debajo y un pantalón de traje con una línea estampada en los costados. Fuentes cercanas a la reina Sofía confirman a Vanitatis que el traje es del diseñador Alejandro de Miguel. El toque de color lo dio con un bolso estilo maletín marrón que ya utilizó en la boda de su sobrino Philippos de Grecia con Nina Flohr en 2021. Como complemento, utilizó un broche de oro y dos collares que destacan.

A su llegada, la reina Sofía ha sido recibida por las autoridades autonómicas y por la presidenta del Congreso, Francina Armengol. Al comenzar el acto, la Reina emérita ha entrado junto a la presidenta balear, Marga Prohens, muy sonriente mientras el público se ponía en pie. Un poco antes de llegar, ha sido la madre de Felipe VI quien ha saludado con una mueca cariñosa al reconocer a uno de los invitados.

Un vínculo con la isla que comenzó en 1973, fecha en la que la familia real decidió fijar el palacio de Marivent en Mallorca como su residencia veraniega. Año tras año, los reyes Juan Carlos I y doña Sofía viajaron junto a sus hijos para disfrutar de unos días de descanso. Años en los que posaban ante las cámaras de manera mucho más natural dejando estampas que nunca se volvieron a producir.

Años después, su vínculo con la isla se transformaría para dar paso al tradicional posado con sus tres hijos, cónyuges y nietos. En 2007 fue el último posado en el que la reina Sofía posó junto a todos ellos. Sin embargo, que el resto de miembros desapareciese no impidió que ella viviese alguna polémica más durante sus visitas a la isla mediterránea. Fue a la salida de la misa del Domingo de Resurrección en la catedral de Palma cuando tuvo un encontronazo con la reina Letizia mientras trataba de posar junto a sus nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

Ahora, la emérita suele viajar hasta allí con la compañía de su hermana, Irene de Grecia, y su prima Tatiana Radziwill. Durante esos días también aprovecha para realizar algún acto público, como la visita al Banco de Alimentos de Mallorca el pasado mes de septiembre. Es por estas actividades por las que el Gobierno autonómico ha decidido concederle, después de más de 50 años visitando la isla, la Medalla de Oro de las Baleares.