El cariñoso gesto de Felipe VI con Simoneta Gómez-Acebo que muestra cómo es la relación con su familia

Demostrando el gran cariño a Fernando Gómez-Acebo y a su familia, el tanatorio de Tres Cantos (en Madrid) se ha convertido en el epicentro para buena parte de la alta sociedad y aristocracia española. La muerte del hijo de la infanta Pilar a los 49 años de edad, por problemas de salud respiratorios, cogía a muchos a por sorpresa.

Mostrándose desolados por el fallecimiento del hermano de Simoneta Gómez-Acebo. Así vimos llegar a su capilla ardiente a numerosos rostros conocidos, como Xandra Falcó, Rafa Medina y Laura Vecino, José María Aznar Jr., Ágatha Ruiz de la Prada, Adolfo Suárez, Blanca Suelves y familiares como sus hermanos, sobrinos o su cuñada, Andrea Pascual. Además de su tía, la reina Sofía, y sus primos, la infanta Elena y el rey Felipe, junto a la reina Letizia.

Un duro trance familiar al que los Reyes llegaron a última hora de la tarde con el rostro muy serio. Así, los reyes Felipe y Letizia fueron al tanatorio donde se encontraba la capilla ardiente de Fernando Gómez-Acebo pasadas las siete y media en un coche conducido por el propio monarca. Una vez en el recinto, entraron caminando por la puerta principal, al contrario de lo sucedido con la infanta Elena, que esa mañana apostó por una puerta más discreta.

Tras aparcar el coche en el parking del tanatorio, al igual que el resto de visitantes, los Reyes entraron a apoyar a los Gómez-Acebo. Una llegada discreta y con total normalidad de una salida de carácter íntimo y familiar. Una vez dentro del tanatorio, les pudimos ver hablando con varias personas en la recepción del mismo.

El apoyo del rey Felipe

Durante su estancia de alrededor de una hora y media, pudimos ver cómo el rey Felipe se mostraba de lo más cercano con su prima, Simoneta Gómez Acebo. Además de sujetarla de la mano o de ir sirviéndola como apoyo, al enhebrar su brazo, los dos primos mostraron la cercanía que existe entre ellos.

Más aún en un momento tan difícil. Una cercanía con su familia que el rey Felipe VI ya había demostrado en los momentos previos al fallecimiento de su primo Fernando. Unas muestras de cariño público dejando de lado el protocolo que también vimos, con su padre, el rey Juan Carlos, en el reciente homenaje a Constantino de Grecia.

Como pudo saber Vanitatis, el monarca visitó el hospital de Pozuelo de Alarcón, donde se encontraba ingresado para estar en esos difíciles últimos momentos con él y con el resto de sus primos. Una relación familiar muy buena entre el rey Felipe VI y sus primos, que se ha dejado sentir en infinidad de ocasiones. Especialmente con Beltrán Gómez-Acebo, parte del círculo de amigos íntimo del Rey y, compañero de escapadas.

Además, el monarca también ha querido acompañar a los hijos de su tía, la infanta Pilar, en el entierro de Fernando Gómez-Acebo, que ha tenido lugar en el cementerio de San Isidro, en Madrid, donde ha entrado caminando y con el rostro muy serio por el doloroso momento.