La reina Sofía, con blazer de impresión y el bolso estrella de Chanel en los Premios Iberoamericanos del Mecenazgo

Tal y como estaba previsto en la agenda oficial, el reloj marcaba las seis de la tarde cuando doña Sofía ha aparecido a las puertas de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando para cumplir con una de esas citas vinculadas con el mundo de la cultura a la que es asidua desde hace años. Hablamos de los Premios Iberoamericanos de Mecenazgo, galardones promovidos por la Fundación Callia y dedicados a respaldar las grandes acciones, realizadas desde la humildad y la generosidad, dentro del sector, que hoy, lunes 4 de marzo, celebran su X edición.

Siguiendo con el protocolo establecido en este evento, la Reina emérita, tras realizar los saludos y fotografías oficiales, se ha desplazado hasta el salón de actos del emblemático edificio, donde ha ocupado su lugar en la mesa presidencial y posteriormente se ha abierto la sesión. A su vez, también ha sido la responsable de entregar los diplomas a los tres rostros premiados.

Después de reconocer a figuras del nivel de Carlos Fitz-James Stuart, duque de Alba, o la baronesa Carmen Thyssen-Bornemisza a lo largo de sus ya 10 años de historia, en este 2024 los galardonados en reconocimiento han sido Antonio del Valle Ruiz, en la categoría española, empresario y coleccionista mexicano fundador del Museo Kaluz; María Amalia León, en la categoría latinoamericana, por su contribución a la mejora de la vida de los dominicanos a través de la cultura, las artes, la educación y el respeto al medioambiente; y Daniel Buren, en la categoría internacional, por su contribución a humanizar los espacios públicos a través de su obra, creando un espíritu crítico en el ciudadano.

Para la ocasión, doña Sofía ha decidido presidir la iniciativa social enfundada en un llamativo estilismo dos piezas, protagonizado por una blazer de impresión realizada en un tejido de estampación geométrica en tonalidades moradas y malvas con manga francesa y abotonadura ladeada. No obstante, ha sido la tonalidad de su pantalón de pinzas 'wide leg', marrón chocolate, la que ha dejado claro que la royal está completamente al tanto de las tendencias, ya que se trata de uno de los colores de la temporada.

A su vez, la mujer de origen helénico ha trasladado dicha gama cromática a los accesorios de su look, donde no han podido faltar, como es tradición en ella, múltiples piezas de oro encabezadas por un broche en la solapa. Entre tantas joyas de valor incalculable, la esposa de Juan Carlos I ha seleccionado también uno de los clásicos de la moda más codiciados: el bolso 2.55 de Chanel. Este modelo acolchado realizado en piel de ternera envejecida, cuyo valor asciende a los 10.500 euros, no puede faltar en los armarios más exclusivos.

De esta manera, la Reina emérita ha retomado su agenda oficial después de vivir uno de sus momentos personales e institucionales más especiales. Era el pasado jueves 29 de febrero, cuando se trasladó hasta Palma de Mallorca para ser condecorada con la Medalla de Oro de las Islas Baleares. Este gesto, que la unió más aún a su lugar de descanso y refugio, si tenemos en cuenta su devoción por Marivent, fue expresado en su discurso: “Estas islas maravillosas que siempre me han acogido con tanto cariño y afecto. Aquí me siento como en casa”.

Durante su breve visita, tras vivir la misa homenaje a su hermano Constantino de Grecia en Londres, doña Sofía posó con un total look rojo de original traje de chaqueta con puños acolchados firmado, tal y como confirmaron a Vanitatis, por el diseñador Alejandro de Miguel. En el terreno de los complementos, lució un bolso estilo maletín marrón que ya utilizó en la boda de su sobrino Philippos de Grecia con Nina Flohr en 2021.