El accidente de esquí por el que Miguel Urdangarin ha perdido su curso de monitor

Miguel Urdangarin, el gran desconocido de los cuatro hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, se trasladó a Ginebra a finales de 2023. El tercer hijo de la expareja terminó en verano su licenciatura en Biología Marina y decidió trasladarse a Ginebra a vivir con su madre. Su hermana Irene se iba de cooperante a Camboya en enero y la Infanta se iba a quedar sola, así que Miguel decidió acompañarla en su soledad.

Y aprovechó su vida en Suiza para apuntarse a un cursillo de profesor de esquí, un cursillo que ha terminado un poco mal: el joven tuvo un accidente esquiando y tiene la rodilla fastidiada. Lo veíamos estos días en la revista ‘Semana’, que dio en exclusiva las imágenes del joven con su abuelo, el rey Juan Carlos, que estaba de visita en la ciudad para tratarse los huesos en una clínica especializada. En las fotografías vimos que Miguel llevaba la rodilla inmovilizada y se intuía que caminaba con dificultad.

Desde Vanitatis hemos preguntado a su entorno para saber qué es lo que le sucede y son varias las fuentes que apuntan al mismo motivo: un accidente de esquí que le ha dejado la rodilla tocada y que podría incluso llevarle a pasar por quirófano. Así pues, su madre, la infanta Cristina, que ha estado de viaje de cooperación hasta hace poco, se quedará en Ginebra esta Semana Santa para estar con su hijo, pendiente de la posible operación.

La Infanta, en Latinoamérica

Doña Cristina ha estado en Latinoamérica y tenía previsto viajar a Abu Dabi esta Semana Santa para estar con su padre y parte de su familia, pero permanecerá en la ciudad suiza para estar junto a su hijo.

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Cabe recordar que padre e hija se vieron tan solo una noche, cuando el exrey viajó a España para participar en las regatas del Club Náutico de Sanxenxo e hizo una escala de una noche en Ginebra. El monarca sigue un tratamiento médico con células madre en una prestigiosa clínica de Ginebra y aprovechó su vuelta a Abu Dabi para hacer una parada en la ciudad suiza y seguir con el proceso para mejorar su movilidad. Pero esos días su hija no estaba en Ginebra, estaba en Colombia, tal y como ha podido saber Vanitatis, en un viaje de cooperación como directora del Área Internacional de la Fundación La Caixa.

Miguel y su abuelo

Por eso, en las fotografías publicadas por la citada revista no vemos a doña Cristina y sí a Miguel, su hijo. Porque la Infanta no estaba. Mientras, el nieto de Juan Carlos I visitó a su abuelo en el hotel Four Seasons, donde se aloja cada vez que viaja a Ginebra -que son muchas menos de las que se está informando últimamente-.

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La vida de Miguel en Ginebra ha cambiado a raíz del accidente. Tuvo que terminar el cursillo de monitor de esquí antes de tiempo y ahora pasa los días en casa de su madre, sin mucho que hacer. El joven terminó hace cuatro años el bachillerato en el prestigioso colegio internacional Ecolint de la ciudad suiza y se mudó a Reino Unido, donde estudió Biología Marina. Se matriculó para empezar uno de sus sueños y lo logró: ya es biólogo marino y en julio de 2023 se graduó como licenciado.

Biología Marina

Una vez terminó los estudios universitarios decidió viajar y después se instaló en Suiza, donde comenzó el citado cursillo que, según fuentes del entorno de los Urdangarin, no tiene nada que ver con la profesión que quiere desarrollar. Ha sido, añaden, un tiempo de descanso para ponerse las pilas y emprender su vida laboral relacionada con su carrera universitaria.

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Quienes lo conocen bien aseguran que es uno de los sobrinos de Felipe VI más responsables y quizás el más consciente de su capacidad intelectual. Eso lo ha convertido en un espíritu libre que quiere pasar unos meses cerca de las montañas, haciendo trekking, escalando y viajando por el mundo. Pegado, como decíamos, a la tierra y al mar. Y, a finales de 2023, el esquí se convirtió en su objetivo. Por ese motivo no pudo estar en la fiesta del 60º cumpleaños de su tía, la infanta Elena: estaba comprometido con las clases de profesor.

Recuperación

Pero el proyecto se ha truncado por el accidente, que no ha sido grave pero sí duro, y cuando se haya recuperado, se instalará de nuevo, con toda probabilidad, en Reino Unido para especializarse y decidir entonces cuál será su camino profesional. Su gran pasión, decíamos, es la naturaleza, sobre todo el mar, siempre ha sido así, por lo que seguro que estudia algo relacionado con los océanos.

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Ante la incertidumbre propia de la edad, desde su círculo subrayan que no creen que vaya a tener problema alguno en conseguir sus objetivos: es un chico tenaz, voluntarioso, muy estudiante y altamente inteligente.