La poderosa razón por la que Kate Middleton se niega a un reencuentro con el príncipe Harry y su mujer, Meghan Markle

Kate Middleton se encuentra centrada en su recuperación tras el diagnóstico de cáncer que ha trastocado por completo su vida y la de los suyos. La princesa de Gales quiere que todo sean energías positivas en este proceso de sanación, de ahí que tanto el príncipe Guillermo como ella hayan dejado olvidado el problema del príncipe Harry hasta que todo vuelva a la normalidad. Así lo confirma 'The Telegraph', que asegura que Kate no tiene ninguna intención de reencontrarse con su cuñado cuando este viaje al país en mayo para no despertar viejos fantasmas que puedan afectarla anímicamente.

El príncipe Harry y Meghan Markle se enteraron del cáncer de Kate Middleton como la gran mayoría, a través del vídeo que Kensington Palace publicó el pasado viernes, en el que aparecía la princesa sentada en un banco y explicando cuál es su situación. Según reporta 'The Sun', la heredera cree que los duques de Sussex "no son de fiar", de ahí que no confiase en ellos ni les contase su enfermedad antes de hacerlo público para todo el mundo.

Horas más tarde de conocerse la noticia, la pareja ha emitido un comunicado a través de la revista 'Harper's Bazaar': "Deseamos salud y curación para Kate y su familia, y esperamos que puedan hacerlo en privado y en paz".

Asimismo, después de hacerse público el diagnóstico de cáncer de la esposa del príncipe Guillermo, Harry y Meghan Markle se pusieron en contacto directo con los Gales, según ha asegurado el editor de 'ITV Royal', Chris Ship. La pareja, afincada en Estados Unidos, quiso enviar un mensaje privado dirigido a Kate Middleton y su marido, se desconoce si a través de teléfono, videollamada o mensaje escrito, y según fuentes consultadas por los medios británicos, se cree que tanto Harry como Meghan se enteraron de la triste noticia a la vez que el mundo entero.

A pesar de este acercamiento por la enfermedad de Kate, no hay intención de una reconciliación entre la familia. La desconexión de los duques de Sussex con la familia real británica es casi completa. Más aún si tenemos en cuenta la escasa relación que existe entre los hermanos, que incluso hacen un esfuerzo por no coincidir ni por videollamada, como pasó hace unos días en el homenaje que se organizó en memoria de su madre, la princesa Diana.

Una noticia que el propio Guillermo podría haber notificado en persona a Harry hace apenas unas semanas tras conocerse que Carlos III también padecía cáncer. En el momento en el que lo supo, el menor de sus hijos cogió un avión, dejó en casa a Meghan Markle y a sus hijos, y voló más de 8.000 kilómetros hasta la capital inglesa para un muy breve encuentro con el monarca.

Sin embargo, no se reunió con su hermano ni visitó a su cuñada, a pesar de que esta ya se encontraba convaleciente de su operación abdominal, que se llevó a cabo a mediados de enero. Ahora, Harry tiene planeado volver a Londres para asistir al servicio religioso con motivo del décimo aniversario de los Invictus Games. Una cita que se celebrará en la catedral de St. Paul y a la que el duque de Sussex no faltará. Quizás sí aprovecha para ver a su padre, Carlos III, pero ya está claro que no hay intención, por ninguna de ambas partes, de un cónclave con los Gales.