Los dos detalles del look monocolor de Máxima de Holanda con los que da una nueva vida a una blazer de hace 14 años

Gracias a que es la única royal que se encuentra estos días trabajando de forma activa y pública, hemos comprobado que tiene ganada la fama de ser una de las que más reutilizan sus prendas. El último look monocolor de Máxima de Holanda nos deja dos detalles con los que ha dado una nueva vida a una blazer que tiene 14 años. Nada más y nada menos.

La cita, la última antes de desaparecer unos días por las vacaciones de Pascua, estaba relacionada con la importancia de la salud mental de los jóvenes. Se trataba de la presentación de una herramienta online para el entorno adulto que rodea a los jóvenes, de cara a que puedan identificar sus problemas o saber cómo conversar con ellos y ayudarlos.

Por eso, Máxima de Holanda ha apostado por un look estilo working monocolor, pero con algunas características que lo hacen único, especialmente por ese reciclaje extremo que la argentina ha hecho de las prendas protagonistas. Y es que no solo la blazer tiene 14 años a sus espaldas, sino que los pantalones tienen nada menos que 22, ya que los estrenó poco después de casarse con el actual rey Guillermo.

Así, queda claro que la argentina no destierra ninguna prenda definitivamente. O se las presta a sus hijas para que se puedan seguir utilizando o las luce ella misma cuando las creíamos más que olvidadas en un rincón de su armario. Eso sí, hay dos detalles con los que ha querido dar un toque a esta blazer, que estrenó en 2010 para la boda de Carlos Javier de Borbón, duque de Parma y primo del rey Guillermo Alejandro.

Y es que, si en aquella ocasión la lució con uno de sus característicos broches tamaño XXL, en ese caso de piedras negras a juego con su maxipendientes, esta vez ha querido tirar, también apostando por la moda sostenible, de uno de sus adornos favoritos para la solapa. Hablamos de dos arañas creación del joyero argentino Celedonio, al que le gusta trabajar con materiales de desecho.

Además, Máxima ha querido añadirle otro toque diferente a este diseño de Natan, inconfundible por la rigidez de su tela y estos tornasolados que tanto gustan al diseñador belga. La reina de los Países Bajos ha añadido a la blazer un cinturón fino de piel, en color negro, rematado con una lazada al frente para aportar un toque diferente a esta chaqueta, ya de por sí original, puesto que presenta las hombreras ligeramente de punta y con volumen.

La pieza en cuestión fue utilizada desde su estreno en tres ocasiones más, una de ellas tan significativa como los retratos oficiales que se distribuyeron por el 40º cumpleaños de Máxima de Holanda. Pero la vimos por última vez en 2016 y nunca más se supo. Ocho años después, la argentina ha decidido rescatarla del fondo de su armario, demostrando por qué es una de las royals más implicadas en el movimiento de la moda sostenible.

Para rematar este estilismo tan concienciado con el medioambiente, ha utlizado unos stilettos en color negro y una cartera a juego, además de esa mezcla de pulseras y anillos, todos con algún significado familiar y emotivo.

Esta será, con casi total seguridad, y salvo imprevistos, la última vez que veamos a Máxima de Holanda en público antes de sus vacaciones de Pascua. Su agenda y la de su marido, el rey Guillermo, están vacías desde el Jueves Santo, cuando también empieza sus vacaciones su hija pequeña, Ariane, hasta el próximo día 9 de abril.

Comenzará entonces su agenda del mes, marcada por dos grandes acontecimientos. Por un lado, el Día del Rey, cuando veremos, un año más, a la familia al completo. Por otro, y mucho más esperado, la visita de Estado de los reyes Felipe y Letizia a los Países Bajos, prevista para los días 17 y 18 de abril y que promete darnos grandes momentos.