El rey Juan Carlos, protagonista de la boda de Almeida: ovación de tres minutos y confidencias con doña Sofía
El alcalde de Madrid levantó su copa y pidió un brindis por don Juan Carlos, que recibió un largo aplauso que le emocionó tanto a él como a la reina Sofía y a las Infantas
La boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y Teresa Urquijo, celebrada este sábado, reunió a parte de la familia Borbón. La razón era el parentesco de la novia con los Reyes eméritos y sus hijos.
Desde semanas atrás se sabía de la presencia de doña Sofía y las infantas Elena y Cristina, como adelantó Vanitatis. Lo que no estaba confirmado hasta hace pocos días, por la información de Silvia Taulés, era que don Juan Carlos viajaría desde Abu Dabi a la capital para estar presente en la boda de la nieta de su prima segunda.
Para el Rey emérito, este enlace ha sido un reconocimiento doble. En la calle, con los vivas que le dedicaron los ciudadanos al entrar en la iglesia de los Jesuitas. Le ofrecieron otra alternativa para acceder al templo, por una puerta situada en la calle Maldonado donde resultaba más cómodo, pero eligió la visibilidad.
El otro baño de multitudes fue después, en el convite, por los tres minutos de aplausos que le dedicaron los invitados. Este reconocimiento fue a una hora torera, alrededor de las cinco y media de la tarde y una vez que Martínez-Almeida finalizó su discurso nombrando a sus padres y confirmando que era el día más feliz de su vida.
Levantó su copa y pidió un brindis por don Juan Carlos primero y después por doña Sofía. "Levanto mi copa por el Rey, al que agradezco que esté con nosotros. ¡Viva el Rey!". En ese momento, todos los invitados se pusieron en pie con sus copas en alto y respondieron; "¡Viva el Rey, viva España!". Durante tres minutos, aplaudieron al exjefe del Estado.
En ese momento, el homenajeado se emocionó, al igual que la reina Sofía y las Infantas. Uno de los detalles que llamó la atención a los invitados que lo presenciaron era la buena relación del matrimonio real. Al menos así lo aseguran a Vanitatis. "La reina Sofía se acercó más de una vez a don Juan Carlos, como si no hubiera pasado nada entre ellos. Imaginamos que ya, con la edad que tienen, las cosas feas se aparcan".
Los Reyes eméritos estuvieron en la mesa principal y flanqueaban a los novios. La Reina, a la izquierda de Almeida, y el monarca jubilado, junto a Teresa. Frente a ellos, la princesa Ana de Orleans, viuda del infante don Carlos Borbón Dos Sicilias.
Don Juan Carlos voló acompañado de su nieto Froilán. Pasó por el palacio de la Zarzuela, aunque no ha sido posible confirmar si durmió en la que ha sido siempre su casa. Vanitatis se ha puesto en comunicación con el gabinete de comunicación, que no tienen datos sobre este aspecto.
El emérito permanecerá en Madrid hasta el martes. El lunes se celebra la misa funeral en recuerdo de Fernando Gómez-Acebo, hijo de la infanta Pilar, que falleció el pasado mes de marzo. De nuevo, la familia Borbón volverá a reunirse, aunque en este caso sea por una fecha triste. En la liturgia religiosa estará también el rey Felipe VI, que mantuvo una relación de hermanos con los primos por vía paterna.
La boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y Teresa Urquijo, celebrada este sábado, reunió a parte de la familia Borbón. La razón era el parentesco de la novia con los Reyes eméritos y sus hijos.
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