El cansancio del príncipe Guillermo: desgaste físico y una vuelta al trabajo no tan clara

El príncipe Guillermo retomó este jueves su agenda oficial tras tres semanas de vacaciones. Primero, visitó la sede de una organización contra el desperdicio de comida y la pobreza alimentaria. Más tarde, se trasladó a un centro juvenil, situado cerca de Londres, con el que trabaja la ONG. La expectación era alta y, pese a no hacer ninguna mención a cómo se encuentra Kate Middleton, a través de su lenguaje corporal se pudo ver como no ha sido fácil tampoco para él.

“Se mostraba hablador y simpático, riendo y bromeando con los voluntarios, pero físicamente se le notaban pequeños signos del desgaste que le han causado los últimos meses”, explicó la periodista Rebeca English. Pese al cansancio que pudo mostrar, no dudó en ayudar a las labores de la asociación y se puso manos a la obra, a cocinar y a emplatar.

Fue así como conoció a una de las voluntarias con quien conversó animadamente. Durante la charla, ella le pidió que cuidase de Kate, a lo que él respondió repetidas veces que lo haría. “Solo cambió rápidamente de tema cuando quedó claro que estaba al borde de las lágrimas y que el príncipe se esforzaba por no avergonzarla delante de las cámaras”, confesó la corresponsal.

Después de este significativo acto, todo apuntaba a que poco a poco las apariciones del príncipe de Gales podrían ser más frecuentes, pero no es así. “No debemos esperar un regreso a sus funciones a corto plazo”, apunta Rebeca. Fue el rey Carlos III quien le dio el beneplácito para que redujese su presencia pública y así ayudar en todo lo posible en el bienestar de su familia. “Esperamos que comprendáis que ahora necesitamos algo de tiempo, espacio y privacidad mientras completo mi tratamiento”, explicó Middleton durante su anuncio.

Los príncipes de Gales y sus tres hijos viajaron hasta Anmer Hall, una propiedad ubicada en Norfolk, donde disfrutaron del estilo de vida rural con motivo de las vacaciones de Semana Santa. Fue el pasado miércoles cuando los pequeños volvieron al colegio y Guillermo se preparó para la vuelta del día siguiente.