Todos los looks de la reina Letizia en el Premio Cervantes: de vestidos conservadores a una pauta que se repite

Es una cita que nunca falta en su agenda desde que son Reyes de España. Cada 23 de abril, coincidiendo con el Día del Libro y con Sant Jordi, don Felipe y doña Letizia se desplazan hasta Alcalá de Henares para hacer entrega del Premio Cervantes, que en esta ocasión reconoce la labor del escritor español Luis Mateo Díez. Se trata de un acto ceremonioso, en el que el Rey, portando el bastón del alcalde alcalaíno, luce chaqué y la insignia del Toisón de Oro, mientras que la Reina suele apostar por vestidos conservadores, es decir, serios y sobrios.

Incluso hemos encontrado una pauta que doña Letizia ha seguido en varias ocasiones en la entrega de este premio. Y es la de lucir en Alcalá de Henares el mismo vestido que estrenó unos meses antes, en la Fiesta Nacional. Al ser dos actos de gran relevancia, a la Reina le sirve el mismo diseño para ambas ocasiones. Con motivo de la entrega del Cervantes repasamos todos los looks de doña Letizia en esta cita.

Su Majestad tiene la costumbre de no estrenar vestuario en el Cervantes. Así lo ha hecho desde que lo entregó por primera vez como Reina en la edición de 2015. En aquella ocasión, doña Letizia apostó por un vestido rojo de Felipe Varela con motivos orientales bordados y botonadura en la parte delantera. Un look que combinó con salones burdeos de Lodi, cartera de mano de Adolfo Domínguez y los pendientes de rubíes de la joyería Aldao.

En 2016, doña Letizia elegía el mismo modelo que había estrenado meses atrás, en la celebración del Día de la Hispanidad. Un dos piezas de Felipe Varela formado por vestido azul marino de manga corta con una raya vertical en color negro y chaqueta también azul. Esa vez sí se puso los pendientes de Bulgari con la gran aguamarina, y completó su estilismo con salones azul marino y cartera de mano a tono.

Para la ceremonia de 2017 repetía la fórmula anterior: llevar el look que había estrenado en la Fiesta Nacional del año anterior, un vestido abrigo blanco con flores negras bordadas, de Felipe Varela, con el que estaba realmente favorecida. Los complementos nude y los pendientes de diamantes y perlas australianas acababan de redondear este estilismo de 10.

En 2018 la Reina volvía a confiar en Felipe Varela con un diseño de aires románticos en rosa palo en el que destacaba un abrigo bordado de flores con ondas en el bajo y un vestido de raso liso. Un conjunto que combinó con salones nude de Lodi y una cartera de mano de Magrit.

Para la ceremonia de 2019, la última antes de la pandemia, la Reina se decantaba por un conjunto con el que siempre ha recibido muy buenas críticas. Un diseño de Carolina Herrera en gris perla formado por un vestido de manga corta con lazada en la cintura y un abrigo de estilo oversize. Lo completó con accesorios en piel de serpiente con un toque rockero, ya que llevaban púas, y pendientes de diamantes.

En 2020, y ya en plena pandemia, no se pudo celebrar el Cervantes como siempre, por lo que a finales de año los Reyes decidieron viajar a Barcelona para entregárselo a Joan Margarit en persona. La Reina eligió para ese encuentro el vestido en color crema con bajo asimétrico del que no sabemos el origen.

En 2021 sucedió algo parecido. Fueron los Reyes los que se desplazaron hasta casa del escritor, en este caso de Francisco Brines, para hacerle entrega del galardón. La Reina sorprendió esa vez apostando por un look vibrante de Zara que ya le habíamos visto en su visita de Estado a Argentina en 2019. Un dos piezas naranja formado por top asimétrico y pantalón acampanado.

En 2022 fue la vuelta a la normalidad tras la pandemia. Pero la Reina optó por un look bastante sombrío. Doña Letizia recuperó de su armario un vestido azul de Carolina Herrera. Un diseño con manga larga, cuello cerrado con un finísimo escote lágrima y relieves en negro en brazos y cintura, de lo más formal. Lo combinó con unos salones en azul marino firmados por Magrit, de charol, con una tira diagonal en el empeine. Unos pendientes de aro en oro blanco con diamantes y aguamarinas redondeaban un look demasiado sobrio.

En la última edición, la de 2023, la Reina volvió a repetir pauta, eligiendo para la ocasión el look que había llevado en la Hispanidad del año anterior. En concreto, se decantó por un vestido de la firma Vogana, de nombre Nanda, realizado en gasa. Presenta un original escote cruzado, mangas abiertas con puños marcados, cintura destacada y larga midi. Como complementos eligió unos destalonados nude de Carolina Herrera, y unos nuevos pendientes de Pepe Alba, con un rectángulo en oro, perlas cultivadas barrocas cuadradas y prehnitas facetadas.

Queda por ver si en esta ocasión decide también echar mano del vestido del último Día de la Hispanidad, un diseño azul con estampado de flores firmado por Juan Vidal, o, por el contrario, nos sorprende con algo nuevo.