Los amigos españoles de la reina Máxima de Holanda: de los Cortina-Cué a Cayetana Álvarez de Toledo
La reina de los Países Bajos guarda amistad con numerosos rostros conocidos de nuestro país. Este pasado fin de semana asistió en Mallorca a un evento de los Coritna-Cué
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La reina Máxima es una persona cercana, simpática y muy empática. No lo decimos nosotros. Lo aseguran todos aquellos que la conocen. De hecho, en su momento se convirtió en la gran aliada de Masako de Japón y de Charlène de Mónaco, dos royals que lo han pasado verdaderamente mal. Por su carácter, no es extraño que tenga amigos por todo el mundo, y eso incluye España, un país al que tiene mucho cariño, pues fue en Sevilla donde conoció a su marido, Guillermo Alejandro, y en Madrid ha residido su hija mayor, Amalia, durante un año.
La argentina tiene varias amistades residiendo en España, de ahí que sus viajes a la península sean asiduos. El último se produjo la pasada semana. Acompañada por el rey y su hija mediana, la princesa Alexia, Máxima acudió a la puesta de largo de Alejandra Cortina, la hija de Alberto Cortina y su gran amiga Elena Cué. La reina y la mecenas mantienen una estrecha relación, al igual que lo hacen sus hijas, de ahí que no quisieran faltar a un evento tan especial.
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Como publicó en exclusiva Vanitatis, los reyes de los Países Bajos se desplazaron hasta Mallorca para la fiesta de los 18 años de Alejandra Cortina, un evento en el que Alexia de Holanda dedicó unas palabras en castellano a su amiga y tocaya. Guillermo Alejandro y Máxima se codearon en esa fiesta con lo más VIP de España, entre ellos Florentino Pérez, Nuria González, Isabel Preysler, Marañón, March, Abelló, Gamazo, o apellidos del IBEX como Entrecanales, Prado, o Del Pino.
La de Máxima y Elena no es una amistad reciente, a pesar de que fue en febrero cuando los medios tuvimos conciencia de ello. Siempre han sido muy discretas, de ahí que hasta que no las vieron comiendo juntas acompañadas por Alexia y Alejandra en el madrileño restaurante Horcher de Madrid, una información publicada también en exclusiva por Vanitatis, nadie supiera nada de su vínculo.
Otra gran amiga de Máxima en España es Cayetana Álvarez de Toledo. La marquesa de Casa Fuerte y la reina de Holanda estudiaron en el mismo centro, el instituto Northlands de Buenos Aires. A pesar de que no coincidieron en clase por la diferencia de edad, sí se conocían, y mucho, como contó la propia Cayetana cuando en 2013 Guillermo Alejandro y Máxima visitaron Madrid y en el Congreso de los Diputados se produjo un reencuentro entre la reina y la entonces diputada por el Partido Popular.
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"Máxima es muy amiga de mi hermana, Tristana. Y toda la familia Zorreguieta mantiene una excelente amistad con mi familia. Mis primos son íntimos de su hermano, Martín Zorreguieta". Años más tarde, Cayetana Álvarez de Toledo aprovechaba una entrevista con 'Vanity Fair' para mostrar su orgullo por que una compañera de estudios y amiga de la familia hubiera ocupado el trono holandés: "Es tal como la gente la percibe. Una mezcla de espontaneidad, simpatía e inteligencia. Lo que ha hecho como reina es admirable. No es fácil adaptarse a un país ajeno, con una lengua especialmente difícil y una tarea especialmente exigente”, decía de ella.
Otra amistad del instituto Northlands trajo a Máxima y a su familia a España el año pasado. Y es que la reina compartió aulas con Alexia Iribarren de Corneille, un nombre que en un principio puede sonar desconocido, pero ella es la madre de Maxime Cornielle, quien se casó con la duquesa de Medinaceli. El pasado mes de octubre en Jerez. La argentina, junto a su marido y la princesa Amalia, acudió al enlace que unió al vástago de su amiga con la mujer que tiene más títulos del mundo.
En la fiesta preboda, pudo verse a los reyes y a su hija con los Bulgaria, con los que mantienen una buenísima relación. Incluso se ha llegado a especular con una posible relación amorosa entre Amalia y Boris, el hijo mayor del difunto Kardam y Miriam Ungría. Guillermo Alejandro y Máxima siempre han estado muy unidos a los Sajonia Coburgo, y prueba de ello es que fueron los únicos royals extranjeros que asistieron al funeral de Kardam, celebrado en 2015 en la iglesia de los Jerónimos de Madrid.
En 2019, y cuando se cumplían 20 años desde que se conocieron en la Feria de Abril, los reyes decidieron viajar a Sevilla con sus tres hijas, siendo sus anfitriones Ana Luisa Díez de Rivera y Philippe Lafont. Con unos tacones imposibles, la reina bailó rumba y sevillanas. Una de las veces con Morante y otra con Antonio Benjumea, yerno de José María Pacheco Guardiola, fundador del grupo Konecta.
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Los reyes estuvieron también en una fiesta entre los que se encontraban el torero Miguel Báez Litri; Fernando Martínez de Irujo con su pareja, María; Cristóbal Martínez-Bordiú y su novia; Patricia Medina y su marido; Jerónimo Solís, Simoneta Gómez-Acebo, Pia Getty y su pareja, José Antonio Ruiz Berdejo, y la pintora Cristina Ybarra.
Estas son solo algunas de las amistades de la reina Máxima en España, un país en el que está claro que se siente como en casa.
La reina Máxima es una persona cercana, simpática y muy empática. No lo decimos nosotros. Lo aseguran todos aquellos que la conocen. De hecho, en su momento se convirtió en la gran aliada de Masako de Japón y de Charlène de Mónaco, dos royals que lo han pasado verdaderamente mal. Por su carácter, no es extraño que tenga amigos por todo el mundo, y eso incluye España, un país al que tiene mucho cariño, pues fue en Sevilla donde conoció a su marido, Guillermo Alejandro, y en Madrid ha residido su hija mayor, Amalia, durante un año.