El look de la princesa de Gales en su gran recibimiento: morado y atemporal

Kate Middleton, la siempre elegante Princesa de Gales, ha vuelto a brillar en la final del campeonato de Wimbledon. Este evento, uno de sus favoritos, ha sido testigo de su segunda aparición pública desde que se conoció su diagnóstico de cáncer y ha demostrado una vez más su inigualable sentido del estilo.

Para esta ocasión, Kate ha elegido un elegante vestido midi en color lila de la marca Safiyaa. Este modelo, conocido como Cecilia Lilac, se caracteriza por su diseño en crepé pesado con un corpiño retorcido y mangas estructuradas. Un corte perfecto para estilizar la figura de la royal de manera sofisticada y moderna y que se ha agudizado con una cinturilla en el mismo color.

El tono lila añadió un aire de frescura y el tejido ligero, movilidad al look a la par que comodidad. Su precio se sitúa en los 1.620 euros y todavía está disponible en la web. Este diseño es un ejemplo perfecto del estilo clásico y atemporal.

Kate ha optado por unos accesorios mínimos y así ha dejado espacio para que el vestido fuera el protagonista. Unos pendientes de aro anchos, una pulsera y un broche en los colores tradicionales de Wimbledon (verde oscuro y púrpura). Aunque el protagonista ha sido su anillo de compromiso. Todo coronado con un bolso de mano en color nude.

El peinado también ha jugado un papel importante en su estilismo. Kate ha llevado el pelo suelto, una elección muy común para ella en Wimbledon.

Acompañada por su hija, la princesa Charlotte, Kate mostró una vez más su capacidad para mantener la compostura y el estilo en eventos públicos. Más aún en momentos de desafíos personales.

La princesa ha sido recibida con entusiasmo por el público. Aunque solo tenía ojos para su pequeña. Las cámaras capturaron momentos entrañables entre madre e hija, lo que añadió un toque humano y cercano a la elegancia habitual de Kate.

Un look muy diferente al que optó en a mediados de junio, en el ‘Trooping the Colour’, su primer acto público tras el diagnóstico. Para esa ocasión, la royal eligió un vestido bicolor en blanco con ribetes negros y un gran detalle: un lazo XL en el cuello que aportó un toque divertido. Además, fue confeccionado por una de sus diseñadoras fetiche, Jenny Packham.

La aparición de Kate Middleton en Wimbledon ha sido un deleite tanto para los aficionados del tenis como para los amantes de la moda. Como patrona de All England Lawn Tennis y del Croquet Club, es usual que la esposa del príncipe Guillermo se pasee por el campo. Y este domingo ha vuelto a demostrar por qué es considerada una figura influyente en el mundo de la moda y la realeza.